¿Quién dijo que para brillar era necesario hacer cosas complejas? Es en todo caso el mensaje que parecen enviarnos las agencias italianas de diseño Bartoli Design y Lago con la presentación de su nueva creación que me han simplemente encantado, la mesa Janeiro. No es precisamente un objeto solamente utilitario, sino que me parece ser una verdadera obra de arte. Algo así como una fusión del arte objeto con un simple mueble que todos tenemos en casa. Y esta mesa como quisiera tenerla ya en mi comedor.
Según sus creadores la idea principal fue la de crear una pieza monolítica y rocosa que nos recuerde una montaña rocosa. La inspiración, que le da su nombre a la mesa, encuentra justamente su origen en la elevación rocosa “Pao de Açúcar” o “Pan de Azúcar” en Rio de Janeiro y que es, junto al Corcovado, uno de los símbolos de esa ciudad brasileña. La mesa Janeiro es por su parte una combinación de cemento y de vidrio que le confieren un equilibrio interesante.
La base de la mesa está conformada por dos domos de cemento invertidos que le dan toda la estabilidad necesaria y un estilo único al pie de la mesa. Con un aspecto rudo con detalles que nos recuerdan una piedra natural, el engaño es total y nos podría dejar pensar que realmente se ha usado piedra y no cemento. La parte superior de la mesa Janeiro está originalmente pensada para ser circular y de vidrio transparente. Pero los creadores nos dan la oportunidad de poder personalizarla con otros tipos de vidrios y otras formas como rectangular u ovalada.
La mesa Janeiro me recuerda que el uso del cemento puede funcionar muy bien y ser perfectamente eficiente para el diseño de algunos muebles como mesas y hasta estanterías. Es verdad que, si a priori no es un material que integraríamos fácilmente a la decoración interior de la casa, su uso inteligente puede resultar muy atractivo.
Más información | Bartoli Design
Decoesfera | Twelve Parsecs, una casa en Florida que te propone una inmersión en el universo Star Wars en la que te puedes hospedar via AirBnB
Decoesfera | El edificio más grande fabricado hasta ahora con una impresora 3D es inaugurado y por supuesto tenía que ser en Dubái