En nuestra cocina la suciedad es más habitual que en resto de las habitaciones, se acumula grasa de la preparación de alimentos, hay más humedad, siempre hay accidentes con salsas, refrescos, etc y además hay mucha gente, lo que significa siempre mayor desorden.
Por eso es necesario que tengamos un cuidado especial con los muebles de nuestra cocina que los limpiemos a conciencia, o más que limpiar, sobre todo que los cuidemos.
El cuidado de estos muebles depende muco del tipo de materia del que hablemos, no es igual el cuidado d eunos armarios de madera maciza que deotros en laminado, por eso hoy voy a hablaros de cómo cuidar los diferentes tipos de muebles para obtener el mejor resultado y nuestros muebles de la cocina estén siempre perfectos.
Si se trata de muebles de madera maciza debemos limpiarlos con un paño humedo con agua tibia, y no utilizar detergentes, productos fuertes, o disolventes.
Después de limpiar con el paño hay que secar para que la madera no se deteriore con una gamuza limpia, siempre frotando en e sentido de las vetas de la madera.
Si hablamos de muebles lacados, ya os hice un post monográfico hace algún tiempo sobre los cuidados que necesita, pero en el caso de la cocina en especial, es conveniente limpiar con una bayeta de celulosa con agua tibia y jabón neutro, y secarlos por supuesto, con paños muy suaves.
Si se trata del tercer tipo de materiales más utilizados, los laminados lo mejor es también usar una bayeta de celulosa humedecida en agua tibia y jabón neutro y secarlo con una gamuza limpia de arriba a abajo o de izquierda a derecha, sólo en una dirección.
Estos son los tres casos principales que se pueden dar en nuestra cocina, pero si no se trata de tu caso lo que debes tener siempre en cuenta es que no debes usar:
*productos con silicona o agentes abrasivos
productos con amoniacos
lejías, disolventes, alcoholes o gasolina que puedan producir accidentes
estropajos de acero inoxidable que dañen la superficie
vaporetas