María Lancha
EditorEl caos de esta cocina es ejemplo de muchos infernillos descuidados en hogares aparentemente ordenados. La dejadez, la falta de interés y un desorden que cada vez se acumula más y más, hace imposible la idea de tener una cocina ordenada, limpia, con paz visual y espacios en blanco que evoquen orden y tranquilidad desde un primer vistazo.
Y es que, definitivamente, esta cocina no necesita orden, necesita una reforma. Una reforma que le dé vida a este espacio oscuro y poco luminoso, que modernice su apariencia y una reforma que haga de este espacio caótico un lugar donde cocinar tranquilamente, tengamos todo a mano y se quede todo ordenado incluso después de pasar horas en él.
Más espacio de almacenamiento y un extra de luminosidad
Vía @beforeafter_ideas
No parece la misma. Muebles altos con más almacenamiento, una pared que simula ladrillos y un foco de luz sobre la encimera, lleva al extremo esta cocina sucia y desordenada donde reinaba el caos. Adiós a las estanterías de pared en abierto que estaban llenas de especias, botes y productos de cocina colocados sin orden alguno evocando una sensación de agobio e inestabilidad.
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A cambio, se ha instalado este juego de muebles de pared completamente cerrado y de gran altura que aporta mucho más almacenamiento pero amplifica la paz visual. No se ve lo que hay en su interior y, en el caso de la estantería en abierto, se han instalado cestas de almacenamiento de fibra natural para que aporten ese espacio al aire libre pero sin perder el orden y la decoración.
Una encimera natural con un revestimiento decorativo
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Menos encimera, más almacenamiento. En concreto, este rinconcito de la cocina me parece el espacio justo para utilizar como encimera. La anterior, a pesar de ser más amplia, acogía también más hueco para el desorden. De este modo, la amplia encimera de color blanco ha sido sustituida por este huequecito de madera, con motivos vegetales y un revestimiento decorativo que simula una pared de ladrillos antigua.
Además, los foquitos de techo sobre la encimera aportan mucha más luminosidad y hacen de este espacio de la cocina todo un mosaico acogedor, lleno de vida, más almacenamiento y mucho color.
Un cuarto para la colada en un rincón
Vía @beforeafter_ideas
En lugar de tener la lavadora y la secadora debajo de la encimera, ocupando un hueco innecesario, se ha aprovechado el hecho de acortar la encimera para crear una estantería que simule un 'mini cuarto para la colada'. A cambio, en el hueco de la anterior lavadora, se ha aprovechado para incluir de nuevo estanterías hasta el techo con mucho espacio de almacenamiento.
Imágenes | Vía @beforeafter_ideas
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