Pues poco más que un metro cuadrado es necesario para disfrutar de un pequeño rincón para comer en la cocina. De hecho, un metro veinte por cada lado sería la medida mínima para que puedas disfrutar de una mesa-mesa en la cocina (no barras o baldas frente a la pared). Da igual que la mesa sea muy pequeña. Seguro que has comido en la mesa de algún restaurante tipo bistró, en un espacio parecido a éste.
Y es que una mesa de sesenta centímetros de diámetro sería suficiente para que dos personas puedan estar cómodamente. Si es cuadrada deberá de ser al menos de 60 centímetros por cada lado.
Si el espacio es muy apurado las mesas redondas son más agradecidas porque la curva facilita la circulación y aligera el espacio y además, consigues ese efecto bistró que nos gusta.
A ser posible sitúa la mesita y las sillas cerca de una ventana y no te olvides de poner una lámpara suspendida sobre la mesa. Recuerda que debe dar luz cálida para crear un bonito ambiente.
La lámpara además es un gran recurso estilístico. Por ejemplo, escoge una pantalla de rafia para potenciar el efecto cálido y acogedor de una cocina, una de estilo industrial en cocinas vintage o una pieza de diseño si tienes una cocina de líneas contemporáneas.
Y si las sillas son tipo thonet o de bistró francés (de rafia) tendrás tu propio rincón bistró en la cocina.
Imagen de portada Mikel Irastorza