Botánica, ornitología, arquitectura clásica, zoología, miles de láminas antiguas, series o imágenes sacadas de libros de estudio, han colgado en cocinas, despachos y salones durante mucho tiempo. Las hay compradas en anticuarios, o reproducciones de pueden encontrarse en el Museo de Ciencias Naturales de cualquier ciudad del mundo.
Una clásico que se reinventa y que da una sensación de calidez y a la vez sofisticación, si los marcos y las láminas están bien escogidos. Ya sea una serie de soldados austrohúngaros como galápagos de una expedición a Las Indias, que más bien parecen pequeños dinosaurios que tortugas son un valor seguro en decoración .
Las de botánica suelen ser las que más adeptos tienen, una bonita planta con su nombre vulgar y después el oficial en latín, con un passepartout en tonos claros, un sencillo marco sobre una pared entelada de color un poco más fuerte, como vemos en la imagen de arriba, queda espectacular, convirtiendo un rinconcito en el que nadie se fija, en un ejemplo de interiorismo.
También los animales dan mucho juego, para un cuarto juvenil, las series del mar, ya sea peces como conchas o plantas subacuáticas, son más serias pero menos femeninas, combinadas con unos textiles alegres o vibrantes, como el dormitorio que tenemos en la imagen, que mezcla elementos juveniles con antigüedades, es una fórmula que no falla.
¿Os gusta decorar con láminas antiguas?
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