El olor a madera, a cerámica, a bosque... las vistas increíbles sobre los bosques, la modernidad combinada con la arquitectura tradicional, las chimeneas encendidas...
Así es Vila Mravljevi. Una casa situada en un pequeño pueblo de Eslovenia que despierta en nosotros deseos de trasladarnos hasta allí para disfrutar del relax que ofrece el mundo rural.
La casa de campo, hoy reconvertida en casa de vacaciones, tiene sus orígenes en el año 1880. La casa es de piedra, siguiendo el estilo arquitectónico de la zona. Y durante la rehabilitación, se le sumó un nuevo edificio moderno.
En la vieja casa, en la que hay una cocina, un comedor y sala de estar además de tres habitaciones, las paredes están recubiertas de barro para mantener el ambiente tradicional de la zona.
Al otro lado del patio, está el nuevo edificio, una estructura de hormigón con grandes paredes acristaladas que meten el paisaje en el interior de la vivienda.
En esta parte de la casa podemos encontrar uno de los espacios más atractivos de la vivienda, una sala con una chimenea flotate frente a una pared acristalada, ideal para estar dentro con el fuego encendido y leyendo un libro mientras ver llover o nevar.
Una casa que combina modernidad y tradición y en la que se respira paz y relax ideal para pasarlos últimos días de verano, o ver cómo cominzan a llegar los primeros fríos.
Más información | Vila Mravljevi
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