Aprovechemos ahora que está refrescando un poco para deleitarnos con el interior de una luminosa casa sueca, y disfrutar así de una buena dosis de decoración nórdica de la buena. O, al menos, de la que a nosotros nos encanta.
Si por algo destaca esta preciosa casa es por su increíble luminosidad, gracias sobretodo al intenso uso del blanco, tanto en el revestimiento de las paredes como en la mayoría del mobiliario y los textiles. Tan solo es interrumpido en contadas ocasiones por tonos claros de madera, lo cual hace una combinación ganadora.
Comenzamos nuestra visita por esta luminosa vivienda sueca por el salón-comedor, cuya fotografía encabeza el artículo, en el que quizás se echa en falta algo de decoración por las paredes. No obstante, lo interesante de esta vivienda, como ya hemos comentado, es la increíble luminosidad, por lo que la "desnudez" de las paredes en este caso tiene bastante sentido.
Podemos ver como prácticamente todos los elementos decorativos son de colores más bien neutros y terrosos, de forma que no resaltan demasiado, pero si que colaboran en crear una atmósfera de lo más agradable. Los únicos puntos de color que destacan son los elementos naturales, como las plantas y la fruta del plato.
Una que cosa que nos ha llamado bastante la atención es la disposición del mobiliario, ya que nos encontramos con la mesa de comedor en el centro de la estancia, y el sofá junto a ella, de forma que no están en ambientes separados. Quizás nosotros hubiéramos optado por otra organización, para al menos poder disponer de una pequeña mesa frente al sofá.
Pasamos al dormitorio, el cual hemos de decir que si que nos ha convencido al cien por cien. Se mantiene la sobriedad y luminosidad del blanco cubriendo tanto paredes como puertas, suelo y ropa de cama, pero salpicado con toques decorativos y de color, como las plantas de la ventana o el colorido cojín sobre la cama.
Nos ha gustado especialmente la idea de colocar un banco de madera a modo de mesilla de noche. Disponiendo, como es el caso, de espacio de sobra junto a la cama, es bastante interesante decorativamente, ya que nos puede dar mucho juego a la hora de colocar la lámpara, algunos libros y elementos decorativos.
Mención aparte merece el peculiar --y espectacular, todo hay que decirlo-- suelo blanco de madera que puebla toda la vivienda, y que en esta fotografía del dormitorio podemos apreciar en todo su esplendor. Sin duda colabora con fuerza en mantener la máxima luminosidad en todas las estancias.
Es una lástima que no podamos ver la cocina completa en alguna fotografía, porque si sigue el concepto de este rinconcito para desayunos o picoteos rápidos, debe ser una preciosidad. No sabemos si será por los cruasanes o qué, pero este rincón nos ha transportado directamente a Francia. Hay que ver lo que hace una simple decoración, ¿verdad?.
Vía | My scandinavian home En Decoesfera | Historia del diseño nórdico