A raíz de un concurso sobre energías renovables, el diseñador finlandés Robin Falck presentó su nuevo proyecto de casa auto sustentable y libre de fósiles llamada Nolla. Se trata más bien de una idea de cabaña que no mide más de diez metros cuadrados y que es ideal como casa de campo, chalet para la visitas o búngalo de playa. En todos los casos, es perfecta tanto por su diseño como por sus características.
En efecto, Nolla tiene la particularidad de ser una construcción sostenible que pretende ser libre de fósiles lo que reduce a prácticamente nada su impacto ambiental. Para tal logro, el diseñador se inspiró en las Kesämökkis, las tradicionales casas de verano de ese país nórdico. Con sus formas cúbicas y techo triangular, la cabaña no rompe con el aspecto tradicional del campo finlandés. Esto le permite mimetizarse muy bien en un entorno conocido.
Para lograr su eficiencia ecológica, la cabaña Nolla usa energía renovable a través de paneles solares y energía diésel producido por medio de residuos de cocina. Esto aprovecha de manera óptima los desperdicios humanos que la casa genera normalmente. La estructura de la cabaña, por su parte, está elaborada con madera de chapa laminada con características ecológicas, más económica, ligera y duradera. Esto le permite también ser más fácilmente transportable por lo que es muy conveniente y versátil.
La cabaña Nolla ha sido un verdadero éxito local y llegó a estar disponible en alquiler a través de la plataforma AirBnB. Más recientemente se ha reproducido el proyecto en España de manera temporal en el marco de un evento destinado a la arquitectura y el diseño. De manera general, el proyecto Nolla es una buena muestra de lo que podemos lograr cuando nos enfocamos en mejorar nuestro impacto en el uso de los recursos naturales y nos da un poco de esperanzas en un mejor futuro.
Imágenes | Robin Falck Designer
