Cuando a una casa se le pretende dar una utilidad multifuncional como, oficina, lugar gastronómico creativo, además de vivir en ella, descansar, meditar y jugar, es algo complicado de redefinir. Los propietarios de Kiah House Angela y Rahul tenían la idea de un hogar que fuese un templo para todas las necesidades familiares. De la mano de Austin Maynadr Architetcs nace esta casa en el moderno North Fitzroy de Melbourne (Australia). Un oasis luminoso que os sorprenderá por sus acabados, naturaleza de goma y diseños exteriores muy diferentes a las casas convencionales.
Cada día son más las personas que trabajan desde casa, en remoto, y la creación de este hogar para que englobara todas las prioridades que sus propietarios demandaban (luminosidad, originalidad, aireada y con ambientes fuertes y positivos) tuvo que ponerse en manos del estudio de arquitectura Austin Maynard.
Cerca del Zoo de Melbourne y próximo al parque Edinburg Gardens se buscó un terreno alejado del ruido y el caótico ajetreo urbano. Su arquitectura se caracteriza por filtrar el mundo exterior y crear un hogar fuera de la locura del mundo real, pero ¿qué podían hacer cuando la casa se compartía con diferentes miembros y cada uno con un dilema?
Rahul cineasta y al trabajar desde casa necesitaba un estudio aunque fuese en el jardín trasero. Por otra parte Angela, una apasionada cocinera, su tiempo libre lo dedica a crear platos gastronómicos por lo que necesitaba una cocina con hornos dobles, grifos especiales y espacio de almacenamiento a medida, una cocina versátil e íntima a diario y que se pudiese abrir a reuniones familiares llegado el momento.
Se desarrolló un concepto inteligente de descanso, trabajo y juego similar a los jardines japoneses o los retiros budistas. El formato de casa que responde a la paz que sus clientes demandaban. La filosofía zen se distribuye por todos los espacios de la casa que queda dividida en dos piezas de arquitectura separadas, una de ellas es la casa original. En la segunda casa se encuentra el dormitorio principal (espacio contemplativo y acogedor) lleno de pesadas cortinas para mayor recogimiento, la oficina se sitúa en la parte superior de ésta y está revestida exteriormente con listones de madera tropical lo que difumina la luz natural en su ambiente.
En Kiah House se encargaron crear espacios tanto privados como compartidos para la familia y tuvo gran condicionante la zona de jardín como uno de los espacios auxiliares. Es curioso porque aún siendo zonas comunes quedan aisladas y se adaptan a las necesidades de privacidad cuando las necesitan, sobre todo con hijos adolescentes que buscan sus espacios de confort.
El dormitorio principal se caracteriza por su rincón de oración budista que se abre al jardín y a los estanques entre rocas a través de paneles correderos de doble acristalamiento.
Detalles de lo más originales que visten la casa Kiah
Un árbol enorme de goma perfumado con limón rodeado de un área cubierta para sentarse y meditar.
A través de una modesta escalera se accede al techo de cesped cubierto de plantas y vegetación comestible. Ideado para amortiguar las ramas de goma del árbol en caso de caída. Su propietario ve en la azotea, una creativa extensión vegetal como próspero jardín.
El baño te conduce a sensaciones y lugares distintos a los que realmente te encuentras. Revestido de ladrillo y con un tamaño medio simula una personalidad terrosa, ellos querían simular los paisajes termales Osen (Japón), por ello la fuerte conexión con el pequeño jardín exterior ubicado entre la casa original y la anexa.
Por un pasadizo secreto que corre por detrás de los armarios, desde el baño se llega a la cocina (el templo gastronómico de su propietaria Angela). Si os fijáis no es la típica isla de trabajo en cocina es un trabajo escultórico en madera. La mitad de la parte superior es de madera y la otra de acero inoxidable. El efecto tiene un sentido más comercial que de hogar privado, aunque nos resulta alucinante su forma y concepto. Su parte posterior se voltea y agranda un detalle bastante práctico como barra-mesa.
El espacio de trabajo (despacho) es el más desafiante de toda la casa porque su propietario pedía un lugar donde trabajar y a su vez relajarse. Austin Maynard diseñó una larga y estrecha oficina con estantes de acero perforados (material que rodea el resto de la casa). Con miras hacia el jardín es el espacio más elevado de la casa, un lugar diferente y separado de la función doméstica.
Como broche final para la casa rompecabezas se encargó realizar un mural sobre listones de madera, éste recrea los colores de la naturaleza, una obra de arte que hasta tiene nombre propio "Awakened Flow" (Flujo despierto) realizada por Seb Humphreys. Una explosión colorista que se divisa desde el exterior.
He querido acercaros esta creación arquitectónica porque es increíble su contexto y trasfondo familiar dirigido hacia la meditación. Un fabuloso ejemplo de inteligencia de diseño residencial al compás de soluciones creativas para las necesidades de la vida moderna.
Pidieron una casa luminosa con fuerte personalidad y con unas prestaciones al gusto para relajarse y meditar y lo han conseguido. Espero que sea lo suficientemente cómoda como para vivir muchos años, original lo es.
Fotos | Austin Maynard Architects
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