Hace unos días os abrimos las puertas de la casa de veraneo de Ágatha Ruiz de la Prada, como para que no se extendiera mucho la entrada dejamos pendiente la cocina, el cuarto de los niños y el salón hoy vamos a continuar.
Estas tres partes de la casa son las realmente podemos relacionar con el nombre y el diseño de Ágatha, porque la verdad que esos blancos que vimos en la primera entrega, aunque algunos fueran diseños suyos no es precisamente lo que le caracteriza.
Pero bueno, vamos a empezar con la segunda entrega, que estoy segura de que os sabrá mucho más a vida, si no sólo tenéis que mirar la cocina:
Hay que decir que se puede permitir el lujo de jugar tanto con el color en esta cocina porque cuenta con dos grandes ventajas:
- la amplitud (aunque no es excesivamente grande puede permitirse el lujo de mezclar texturas y colores sin que parezca desordenada)
- la luz natural (que aunque no se ve en la imagen procede de un gran ventanal en el frente.
Gracias a estas dos cosas tenemos una habitación muy viva y colorida, pero para nada parece desordenada, además tiene el acierto de que ha elegido el blanco para la parte superior, sin excederse en el color, lo mismo que los muebles de cocina, que ha elegido lisos para no crear demasiados contrastes.
Lo primero en lo que nos podemos fijar después de en los aciertos es en la cerámica. Tanto la de pared como en la del suelo los diseños son propios, y producidos por una marca con la que colabora y los tiene en venta (por si os apetece copiarla), Pamesa, los mismos que producen sus baldosas en blanco que vimos en la primera entrega de su casa, en el pasillo.
Las sillas también son en color, todas en diseños y colores distintos, lo mismo que las mesas, varias unidas en colores diferentes.
Sin duda el cuarto de los niños es el lugar perfecto dentro de cualquier casa para abusar del color, y en este caso lo hace, sin tanto acierto desde mi punto de vista. Sin embargo, curiosamente las paredes siguen siendo blancas, como en todas las habitaciones salvo la cocina. Curioso.
En el cuarto podemos ver una cama alta, de aspecto señorial a la que le da la pincelada la ropa, a un lado una especie de mesa camilla con un mantel color amarillo. He de reconocer que la combinación de colores y formas que ha elegido para la habitación infantil no me gusta nada.
Sin embargo me encanta cómo ha delimitado la zona de descanso de la zona de juegos con una especie de puerta de corredera. En la zona de juegos podemos ver puf y sillones con los colores y formas que estamos acostumbrados a ver en todos los diseños de la diseñadora.
Y por último vamos con el salón que podemos decir que está a caballo entre las habitaciones frías que vimos en la primera entrega y las más cálidas y llenas de color de esta. En él encontramos también el blanco en suelos, paredes y techos, y el rosa como parte de la decoración a través de los cojines de los sillones.
Imágenes vía | Marie Claire Maison En Decoesfera | Casas de famosos: Ágatha Ruiz de la Prada, Casas de famosos