En pleno auge como empresaria, Anna Padilla, la hija de la cómica y presentadora de televisión, Paz Padilla, no para de sorprendernos con las novedades de su marca de ropa 'Noninà'. Una nueva tendencia en el mundo de las prendas, la cual comparte con su progenitora y, desde hace ya varios años, no para de crecer. Fue el pasado 4 de diciembre cuando la fundadora anunciaba la apertura de la primera mini tienda en Madrid rodeada de caras conocidas en el mundo de las redes sociales.
La joven, que comparte la vida con uno de sus mejores amigos de la infancia: Mario Cristobal, decidió invertir hace unos meses en un pisito en el centro de la capital. Piso que tuvieron que reformar (y aunque ya nos contó en alguna otra ocasión las ventajas de su reforma), fue ayer mismo cuando se abrió en canal a sus más de 855 mil seguidores para mostrar los cuatro errores más importantes de todo ese largo proceso. 'No volvería a repetir por nada del mundo', afirmaba la influencer.
Cuatro errores en la reforma de Anna Padilla
Primero de alquiler, y pasados unos años, Anna Padilla decidió invertir en lo que hoy es su propiedad en el centro de Madrid. No obstante, después de varios meses de reformas, ultimar detalles y acomodamiento en su nueva vivienda, la influencer se ha sincerado sobre los errores de la reforma de su hogar. ¡Te lo contamos!
La sinceridad y naturalidad de Anna Padilla es uno de sus puntos fuertes cuando se trata de redes sociales. La influencer no ha tenido nunca ningún tapujo en abrir a su comunidad todo lo que le atormentaba, los buenos y malos momentos de su vida personal, así como ahora los errores que tuvieron como novatos a la hora de reformar su piso en la capital.
"El primer error, y fue por las circunstancias, es que nos mudamos cuando aún no habían terminado la reforma. No cumplieron los plazos y yo me tenía que ir del piso en el que estaba. El día que yo llego con la mudanza, había ocho personas acabando la reforma y nos vimos aquí solo con un baño, no había lavabo, no había fregadero porque se había roto la encimera, nos lavamos los dientes en la ducha", declaraba.
Pero sin ninguna duda, el mayor error de todos, es el vestidor. "Ya me avisaron de que era muy difícil elegir la estructura interna del armario. Yo me he hecho un vestidor muy pequeño, pero tiene mucho armarios, y está todo mal". Ferrer autocritica la forma, la distribución y los espacios elegidos para colgar sus vestidos, sus abrigos y hasta el espacio para joyas y complementos. "Los cajones son muy pequeños y no me caben bien las camisetas. Mi vestidor lo tiraría abajo y lo volvería a hacer", lamenta.
En tercer lugar, el cuarto de baño. En anteriores 'tour', Anna nos mostraba como de una ventana había sacado un mini cuarto de baño, necesario para la convivencia y evitar roces cuando se trata de vivir dos personas en un mini piso. ¿El fallo? Las paredes pintadas. "Al no ser la pared con azulejos, es muy complicado de limpiar", afirma.
Y por último, el cuarto error son los puntos de luz. "Aunque me gusta como han quedado en el techo, hay muchas cosas que están mal: los interruptores". Y lo cierto es que nosotros también nos subimos al carro de Anna Padilla, es tan complicado saber elegir dónde poner un enchufe o interruptor que, hasta que no decoras, pones todo el mobiliario y haces tu día a día en casa, no sabes los errores que has cometido.
Imágenes @annafpadilla
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