Si hay un error que se cometa especialmente en espacios pequeños, ese es del que os vamos a hablar hoy, no respetar los espacios que necesitan las puertas y las ventanas para abrirse, cerrarse o simplemente para soportar el tránsito a su lado.
La falta de espacio nos lleva muchas veces a querer aprovechar hasta el último rincón, y lo cierto es que, si llevamos esto al extremo, como se ve en la imagen de arriba, puede tener más inconvenientes que ventajas.
Seguro que si vivís en un sitio pequeño tenéis más de una cosa tras la puerta. Una estantería, como se ve en la imagen, una mesa, un florero,... he visto todas esas posibilidades, pero en todas se comete el mismo error, olvidar que la puerta es un espacio móvil y que no siempre está en la misma posición.
En la imagen de arriba, por ejemplo, se ha olvidado que la puerta se abre, y cuando está en esta posición resulta imposible acceder totalmente a la estantería.
Sin embargo, si sólo se tratara de que sólo se puede acceder a lo que hay detrás en una posición no habría mayor problema, pero lo cierto es que muchas veces no sólo se trata de eso, sino que también lo que ponemos detrás puede causarnos problemas para abrir la puerta o la ventana, dificultando incluso la entrada de luz o que con los cierres y aperturas lo que pongamos detrás se rompa o deteriore, sobre todo si hablamos de jarrones o cerámica.
Eso sí, es un error grave y con muchas consecuencias, pero también es cierto que es muy comprensible lo que nos lleva a ello: querer aprovechar los metros y muy fácil de solucionar.
La mejor opción es la de olvidar las puertas tradicionales y cambiarlas por puertas correderas. De esta manera seguiremos aprovechando el espacio que se encuentra a su lado, pero sin los inconvenientes que trae la movilidad de las puertas tradicionales.
En el caso de zonas donde se necesite menos intimidad incluso podemos retirar la puerta, y dejar únicamente el marco o cambiarla por una cortina, es una idea más arriesgada, pero mucho más fresca y nos hará ganar algo de espacio.
Lo mismo con las ventanas, donde podemos optar por sistemas que no necesiten tanto espacio interior para su apertura.
Y sobre todo, el sentido común, que siempre se agradece en los pisos pequeños, si no necesitas una estantería tan grande, no la pongas, utiliza sólo el espacio indispensable y tu casa será mucho más cómoda, además así evitarás los gastos que suponen los deterioros de los muebles o los cambios de puertas.
Imagen vía | Decor8 En Decoesfera | Errores de decoración
Ver 1 comentarios