Hay anfitriones que hacen del hecho de recibir visitas todo un arte. Y los huéspedes e invitados lo agradecen de corazón, ya que ese cuidado es muestra de que su presencia es deseada y celebrada. Dejar pequeños detalles en la habitación o el baño, para que los encuentren en la soledad, es, además de un golpe de efecto, una señal de aprecio.
La idea que proponemos hoy formó parte del ambiente creado por Carmen Barasona para Casa Decor Madrid 2009, y aunque den ganas de dar un mordisco a la tarta, os aseguro que se trata de varias toallas enrolladas sobre sí mismas, rodeadas de unas cintas de tul y terciopelo, coronadas por unas fresas frescas y colocadas sobre una tartera de pie de cristal.
Imaginad las combinaciones de colores que se pueden crear con toallas de diferentes tonalidades. Aquí, el pastel de felpa nos sugiere un dulce de chocolate y nata, pero no perdamos de vista la fresa, el pistacho, la moka o los arándanos, todo ellos combinados con nata, crema o chocolate, según los colores de las toallas de que dispongamos.
Ya estamos tardando en revisar nuestro ajuar de baño; de una manera sencilla podemos armar una tarta que no se come, pero asombra y decora.
En Decoesfera | Decorar para ser el mejor anfitrión
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