En el mundo de la decoración, los baños pequeños son uno de los retos más comunes y uno de los más agradecidos cuando se aplican las tendencias adecuadas. Espacios reducidos pueden convertirse en auténticos oasis de luz, estilo y amplitud si se trabajan con inteligencia visual.
Actualmente, diferentes tendencias e interioristas de referencia, demuestran en sus contenido y creaciones cómo un baño diminuto puede transformarse en un lugar mucho más amplio de lo que realmente es. Estas son las claves que están marcando tendencia.
El poder del color
Los colores neutros siguen dominando, pero esta temporada destacan los blancos cálidos, los grises piedra y los beige empolvados. Estas gamas reflejan mejor la luz, aportan serenidad y generan sensación de mayor espacio en un cuarto de baño que realmente tiene escasos metros cuadrados.
En este contexto, la diseñadora Emily Henderson (@em_henderson) es una de las grandes defensoras de las paletas continuas en baños pequeños. En sus proyectos demuestra que, cuando pared, suelo y ducha comparten una tonalidad suave, el ojo no se detiene en los límites del espacio y el baño parece crecer.
Revestimientos que alargan visualmente el espacio
Otra tendencia que está arrasando es el uso de azulejo alargado colocado en espiga o en vertical, un recurso que amplía ópticamente la altura del baño. También se llevan los porcelánicos XL que tienen como base que, cuanto menos junta, más sensación de continuidad.
Estudios como Norm Architects (@normarchitects) utilizan esta técnica con maestría, combinando piezas amplias y líneas puras para lograr baños minimalistas y visualmente diáfanos, donde el espacio domina por encima de los poco metros cuadrados que puedan tener.
Muebles suspendidos
Una regla de oro para duplicar visualmente el tamaño es liberar el suelo. Los muebles flotantes permiten que la vista recorra todo el pavimento, dando sensación de amplitud. Además, aportan un toque elegante y moderno en cualquier cuarto de baño.
La firma española de baños Inbani (@inbani_design) apuesta firmemente por esta idea en sus proyectos urbanos, donde demuestra que incluso un lavabo compacto, si es suspendido, transforma por completo el baño. Además, este tipo de muebles mejora la limpieza en este tipo de espacios tan pequeños donde apenas tenemos hueco para pasar la mopa, el cepillo o la fregona.
Cristal transparente y mamparas sin perfiles
Las mamparas son esenciales en baños pequeños, pero también pueden convertirse en una barrera visual. Por eso triunfan las mamparas sin perfilería o con perfiles minimalistas, siempre en cristal transparente. Esto elimina interrupciones visuales y permite que la luz fluya sin obstáculos.
La tendencia la trabaja con gran éxito Susanna Cots (@susannacots), que en sus diseños nórdicos utiliza mamparas etéreas que prácticamente desaparecen en la composición de un baño que se funde en colores neutros, casi transparentes.
Iluminación estratégica
La luz es el mayor aliado en un baño reducido. Las tendencias actuales incluyen luces LED ocultas tras el espejo, una iluminación perimetral que da profundidad o espejos retroiluminados que crean un efecto flotante. Son tendencias luminosas que juegan con la luz y el efecto visual que las mismas crean en los espacios.
La reconocida diseñadora Sarah Sherman Samuel (@sarahshermansamuel) es referencia en este tipo de iluminación. Sus baños, cálidos y luminosos, combinan luz indirecta y espejos de gran tamaño, logrando espacios que parecen casi duplicados.
Espejos grandes
Los espejos grandes vuelven a estar en primera línea. Se utilizan de pared a pared o incluso de encimera a techo. El objetivo no es más que reflejar luz y multiplicar visualmente el poco espacio que tenemos. Este es un truco muy utilizado también es pasillo estrecho y alargados, para aportar dimensión.
El estudio Studio McGee (@studiomcgee) es uno de los que más explota este recurso. Sus propuestas incluyen espejos enmarcados en latón o negros, siempre con líneas suaves que aportan continuidad.
Orden minimalista
Por supuesto, un baño saturado parece inevitablemente más pequeño. Por eso, las tendencias actuales se centran en soluciones de almacenamiento oculto dentro de los muebles y cajones, como estanterías abatibles que se instalan en el interior de los cajones y mejoran su colocación y profundidad.
Las cestas uniformes son otro truco a seguir. Estos modelos, muy cuquis y decorativos, se integran dentro del baño como parte de la decoración pero juegan un papel muy importante a la hora de ganar espacio y multiplicar los metros de almacenaje en el baño.
Interioristas como Blanca Fabré (@fabrefauquiestudio) muestran en Instagram cómo un baño minimalista no tiene por qué ser frío, sino organizado, cálido y equilibrado.
Fotografía de portada | Sarah Sherman Samuel
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