El drama que desde ayer estamos viviendo con el incendio del edificio de Valencia nos ha dejado a todos consternados. La forma virulenta en la que el fuego se expandió por la fachada, y el resultado con diez personas fallecidas hasta ahora ha dejado en el aire muchas preguntas sobre cómo se originaron las llamas. El fuego se inició en la séptima planta de uno de los bloques de viviendas afectados, y se propagó rápidamente por la fachada probablemente por la presencia de un material inflamable.
Cuando la promotora FBEX puso en marcha la promoción hace casi 20 años, comercializó sus edificios de la calle General Avilés con un vídeo que publicó en noviembre de 2006 en el que destacaba las calidades y la modernidad de las 138 privilegiadas viviendas en una de las zonas en la que más se construyó antes de la explosión de la burbuja inmobiliaria de 2008.
En el vídeo la constructora anunciaba que la promoción estaba compuesta por dos edificios vanguardistas, unidos por un ascensor panorámico, con fachadas revestidas con un innovador material de aluminio tipo alucobond. Por aquel entonces, la promotora pretendía vivir esta promoción de lujo a 6.000 euros el metro cuadrado.
En el vídeo también se anunciaba que la promoción ofrecía la máxima calidad en los materiales de construcción, "aplicando rigurosos controles de calidad durante todo el proceso de edificación".
En los edificios que ahora se han quemado había 138 viviendas de una, dos y tres habitaciones, además de áticos dúplex con amplias terrazas. Cada una de las viviendas contaba con parquet flotante en madera de haya, excepto cocina y baños. Tenían preinstalación de televisión por cable y TDT, preinstalación de Home Cinema e instalación de red Wifi, además de instalación completa de climatización por bomba de calor mediante conductos en toda la vivienda»
La cocina era de "generosas proporciones y con salida directa al balcón", y estaban equipadas con "con electrodomésticos de la marca Bosch o similar instalados en un mobiliario moderno y actual". Los salones se vendían como luminosos, y con salida directa a los balcones exteriores de impresionantes vistas. La carpintería interior era de madera de haya.
En las zonas comunitarias había piscina exterior, zona ajardinada y un spa con piscina climatizada con jacuzzi, saunas, duchas y vestuarios. Además, el edificio tenía también un amplio vestíbulo con vistas a la zona ajardinada, y trasteros y plazas de aparcamiento con acceso directo a las viviendas. Y según se anunciaba, el edificio contaba con tecnologías innovadoras de ahorro de energía y de domótica del confort.
Fotografía | Google Maps
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