En primavera mucha gente se anima a introducir tímidamente alguna nota de color en su mobiliario. En el caso de la casa que nos ocupa, podemos ver cómo la elección se ha movido entre el rosa y el gris.
El gris oscuro es un color contundente, que quita bastante luz y que se puede usar para separar ambientes como vemos en la imagen principal que ilustra este post. El sofá gris es bastante llamativo pero se ha eliminado su protagonismo colocándole al lado un sillón rosa y con la ayuda inestimable de los cojines, cada uno distinto de los demás.
El sillón se ve reforzado por el tabique color fresa que tenemos a la izquierda y que en general está desprovisto de decoración. Vemos cómo el sofá gris combina con la alfombra de una tonalidad bastante similar pero interrumpida por un dibujo verde que le resta importancia.

Quiero que prestéis también atención al otro tabique color gris claro que da luminosidad y junto con la vitrina forman uno de los puntos de luz de la estancia. Las plantas consiguen romper el esquema cromático que reina en la habitación, dándole no solo vida sino algo de movimiento.
Si nos fijamos con cuidado en la mesa de té, observamos cómo los complementos también siguen la línea del resto de la estancia, y que ahora han decidido además jugar con los materiales y texturas. Este es un buen truco si no queréis saliros de ciertos colores, ya que las texturas dan movimiento y consiguen evitar esa sensación de encorsetamiento que daría si todo fuera más uniforme.
Este salón me encanta por el buen gusto al combinar dos colores que a priori saturarían la vista pero que usados con cabeza dan resultados espectaculares que saltan a la vista. Yo creo que si hubiera visto el sillón rosa solo en una tienda habría pensado que es un poco hortera, pero me ha gustado mucho cómo lo han combinado con el resto de muebles.
Vía | Apartment Therapy
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3 comentarios
annushka
Me encanta la combinación de rosa y gris, pero en estas fotos se ve mucho mas colores y matices que solo gris y rosa. El efecto no me gusta. Sobre todo la incorporación de azules morados y verdes, ademas de biege, marrón y el cojín anaranjado, todo junto y revuelto me parece demasiado. (Para completar la locura falta el amarillo, bueno aquí su función cumplen los marcos dorados) El resultado es eclectico, desordenado y como decir... algo como sucio y descuidado, ya que ademas no solo se mezclan los colores, sino también los estilos. Ademas pienso, que cuando el gris prevalece el aspecto es mas elegante. Una pared de impacto y el sofa sería suficiente. Es necesario cuidar mas la selección de colores auxiliares.
silvia
Lo mismo digo me gusta el gris y rosa pero en estas fotos se ve una macedonia de colores que rechazas por completo, ese armario rojo, la pared rosa, los cojines de colorines, la manta azul, no creo que haya armonia de colores y los muebles en sí me dicen muy poco.
cultura_pop
a ver...
los sillones rosa y gris (que mucho no me agrada), combinan medianamente bien. los demas accesorios, como las macetas, almohadones y demás, están un poco mzclados en cuanto a color y formas, no me parece que logren una armonía agradable.
y la pared rosa del fondo, creo que se vería mucho mejor, si sencillamente se la pintara de blanco. el rosa le da un color antiguo y avejentado a la casa. en éste caso jugarse con ese color quizás estaría bien para los muebles o detalles, pero en las paredes no. obvio para mi, quizás para otro si, no digo que no.