Hace años a nadie se le hubiera ocurrido arriesgarse con este tipo de colores cálidos pero el caso es que darle colores vivos a las casas es una tendencia que cada vez está más de moda, el rojo, en concreto, es un color que puede convertir una habitación en atrevida, fresca, divertida, que sólo se puede usar en habitaciones o viviendas informales, donde no importe su energía, como cocinas o salones.
También podéis utilizarlo en un dormitorio, pero de forma moderada, por ejemplo para pintar la pared de impacto que resalte una pared determinada dentro de una habitación que hayáis pintado de un color neutro, como blanco o beige.
Además, si no queréis arriesgaros mucho, podéis utilizarlo en habitaciones con ventanales, puertas, ventanas, electrodomésticos, muebles grandes, es decir donde las paredes estén mayoritariamente ocupadas por el mobiliario, así conseguiréis todos sus beneficios, pero sin dejar que la energía que desprende domine toda la habitación.