Supongo que nos pasa a todos. Por mucho que nos guste nuestra casa, a veces sentimos la imperiosa necesidad de hacer cambios para dar un nuevo aire. Los seres humanos somos así, necesitamos ir haciendo cambios conforme vamos avanzando en la vida. En mi caso, ahora mismo estoy inmerso en hacer cambios en el dormitorio, una estancia que a veces no recibe la atención que merece frente a otras habitaciones como el salón.
Y dentro de esos cambios, el papel pintado creo que es uno de los recursos más rápidos y efectivos para transformar por completo cualquier estancia, ya que con ellos podemos crear sensación de profundidad, altura y luminosidad, además de dar un cambio radical sin necesidad de renovar el mobiliario o los complementos.
Papeles pintados con motivos vegetales
Los papeles pintados con motivos florales están más de tendencia que nunca. Y este modelo de la colección Yoku de Cole & Son me ha atrapado por completo por la serenidad que puede aportar al dormitorio. Es un diseño pintado a mano creado con acuarelas tradicionales y lápices de caligrafía que recrea un jardín japonés de una forma elegante y sutil, siendo capaz de llevar ese belleza a nuestra habitación, pero con un diseño que no es invasivo ni apabullante. De hecho, su paleta de colores armoniosos y vibrantes a la vez permite crear un ambiente relajante y elegante a la vez que transforma por completo el dormitorio.

En este momento en el que el maximalismo está de vuelta y los interiores deben ser ricos en detalles y texturas, este papel de la Colección The Gardenes Vol.II de Cole & Son dibujado y pintado a mano es ideal. Sobre todo, si te atreves a transformar tu dormitorio en un bosque con una paleta de colores envolvente como esta.

Para los que buscan algo sutil, y de influencia oriental, este modelo XXL de Les Dominotiers es perfecto. Es un modelo luminoso que permite crear volumen en el dormitorio ayudando a crear una atmósfera de lo más relajada, ideal para los dormitorios más modernos y contemporáneos.
Motivos geométricos
Para dar un toque mucho más moderno al dormitorio, aunque bebiendo de las fuentes de un movimiento clásico dentro de la historia del arte, me ha encantado este papeles de la firma francesa Les Dominotiers que combina formas caprichosas con colores de tendencia como el verde o el mostaza. Además, su diseño en vertical hará que tu dormitorio parezca más alto.

Un papel con panteras e influencia Art Decó

Para dar un toque de vanguardia al dormitorio y romper con los esquemas que solemos tener de esta estancia, este modelo de Les Dominotiers es perfecto. El modelo Panthera Argent juega con distintos tonos de verde y reflejos metálicos plateados inspirándose en los códigos de uno de los movimientos más icónicos del siglo XX, el Art Decó.
Modelos discretos y elegantes

Más allá de los papeles pintados con estampados llamativos, también hay modelos sencillos y elegantes que aportan textura y lujo silencioso, como este modelo de Lizzo de la colección Cesto que me ha gustado por permitir dar un toque natural y artesano al dormitorio. El diseño de este papel vinílico se inspira en la artesanía que elabora las cestas tejidas, y su superficie texturizada aporta profundidad visual al espacio.

Este papel pintado de Harlquin diseñado en colaboración con Henry Holland es ideal también para dar textura gracias a las formaciones sutiles y orgánicas de su diseño en estilo muaré con relieve de seda, lo que permite dar la sensación de que has recubierto la pared de tela.
Un papel con efecto madera
Para dar un toque natural, en La Redoute hemos fichado este papel pintado que evoca un mosaico de marquetería neográfica en el color de la madera natural, perfecto para aportar un toque de calidez a tu dormitorio.
Un papel en el zócalo

Si no quieres recubrir toda la pared de papel pintado, también puedes optar por instalar un zócalo que te permitirá dar dinamismo a la pared, pero sin tener una atmósfera sobrecargada. En este caso, la base a medida Villa Iribe de Les Dominotiers es ideal para aportar luminosidad y un toque de diseño a cualquier dormitorio, haciendo las veces de cabecero de la cama. Su diseño, compuesto pro frutas y rosas dibujadas al estilo de Paul Iribe, precursor del Art Déco, se inspira en un bajorrelieve de la fachada de una casa de Enghiens-les-Bains, en la región de Île de France.

De la misma maison parisina, este modelo presenta un patrón de formas redondeadas y contraformas que permiten crear un juego de sombras y materiales ideal para dar un toque de diseño y de elegancia sutil al dormitorio.
Fotografía de portada | Les Domonitiers/Pepe Peñalver
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