Todos sabemos lo sosas que quedan las paredes sin ningún tipo de decoración: un cuadro, fotos, un reloj,... pero también sabemos que en un espacio pequeño, por ejemplo una habitación infantil de reducidas dimensiones, colgar muchos de estos recursos en la pared puede suponer recargar demasiado la habitación y restar algo de espacio útil.
Por eso la idea que podéis ver en la imagen de arriba me ha gustado, simple y sencilla, a caballo entre un mural y la decoración, o mejor dicho la mezcla de ambas, ya que se trata de que elementos decorativos sean los protagonistas de tu mural.
Como veis en la imagen podéis dibujar fotos, cuadros,... o cualquier tipo de adorno, lo que se os ocurra, incluso si lo hacéis en la habitación infantil como hemos puesto el ejemplo podéis dibujar esa puerta pequeña con la que soñáis pero no os da el espacio o una ventana más que de al mar aunque viváis en medio de la ciudad.
Esta imagen ilustró un post de Patch hace algún tiempo y muestra lo mismo, sólo que esta vez, aplicado a nuestro salón… como veis se han dibujado los adornos del espejo, la chimenea y candelabros, amén de los motivos del papel pintado.
Eso sí, una recomendación, no lo intentes si no tienes buena mano.
Imagen vía | Desire to inspire
En Decoesfera | Una buena idea
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