Llegamos al puente de agosto, y seguimos apuntando destinos con encanto para pasar unos cuantos días rodeados de paz, confort y una decoración cuidada y agradable. Hoy, nos vamos hasta la maravillosa Ibiza para conocer Villa Mussa. Una fantásica vivienda vacacional en la que se ha cuidado hasta el más mínimo detalle para lograr que sus huéspedes tengan una experiencia única.
Sus propietarios son unos apasionados por el diseño y la decoración, y eso se nota en el ambiente de esta casa ya existente que ha sido adaptada para estancias turísticas. Con un diseño moderno, pero adaptada al paisaje ibizenco, esta casa ha sido construida con materiales de gran calidad, con líneas rectas, puras y funcionales.
La casa está abierta al exterior mediante grandes paredes acristaladas como si la casa fuera una caja de música que nos deja ver su confortable interior, dejando salir fuera la luz interior por las noches, y permitiendo que la luz mediterránea penetre en su interior por las noches, integrando a su vez el paisaje en las distintas estancias.
El interior ha sido ideado con un diseño vanguardista y confortable tanto en los espacios comunes como en las cuatro habitaciones de las que dispone la casa, con grandes espacios diáfanos y muy luminosos que combinan distintos materiales y texturas tanto en los revestimientos como en el mobiliario que decora la casa, con muebles en una preciosa madera natural, o con muebles que destacan por el minimalismo con el blanco y las líneas rectas.
Como podéis ver en las imágenes, los propietarios de Villa Mussa han cuidado también al detalle las zonas exteriores. En la parte más pegada a la casa podemos podemos encontrar la piscina, el solarium, y un encantador espacio chillout que destaca por su armonía y en el que se combina el agua, el sol y la sombra para garantizar una estancia relajada y agradable.
Una relajación a la que contribuye el hecho de que la casa esté ubicada en el campo ibicenco, en una** finca de 8.000 m2 rodeada de arboles frutales** y alejada del bullicio de otras zonas de la isla, lo que les ha permtido crear este pequeño paraíso.
Sin duda,** un lugar para disfrutar de la paz y el relax**, con un cuidado diseño y situado muy cerca de lugares interesantes. No estaría mal chasquear el dedo y aparecer allí de repente para pasar unos días en esta segunda quincena de agosto, ¿verdad?
¡Ah! Y como sabemos que los lectores de Decoesfera os gustan las fotos del antes y el después, aquí os dejamos unas fotos para que veáis como estaba esta casa antes de que fuera rehabilitada para acoger huéspedes...
Más información | Villa Mussa
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