Algunos tienen la suerte de tener en casa una habitación libre que se pueda amueblar y decorar como cuarto de juegos para los niños, otros no, pero sí pueden habilitar una zona de juegos en el dormitorio infantil o si es demasiado pequeño, en la sala de estar. El caso es encontrar un lugar en la casa en el que colocar las cosas con las que van a disfrutar los más pequeños y que sirvan para estimular su creatividad y les ayuden a aprender.
No se trata de gastar mucho dinero comprando juegos de estimulación, sino de echarle imaginación y tiempo para crear por nosotros mismos esos detalles que hagan que los niños piensen, que se interesen por cosas importantes y que al mismo tiempo se diviertan jugando con sus hermanos, con sus primos o con sus amiguitos.
Hay algo que ya he comentado muchas veces pero que es fundamental en los espacios decorados para niños y es que recordemos que todo aquello con lo que queramos provocar interacción lo debemos colocar a su altura. Tenemos que olvidarnos de los muebles altos y grandes que ellos no pueden manejar, hay que colocar muebles bajitos a los que ellos puedan acceder fácilmente.
En un cuarto de juegos es fundamental el almacenaje, cestos, cajas o muebles de cajones pueden servir para mantener siempre en orden los juguetes. Si estos muebles y accesorios de almacenaje son bonitos y de colores alegres será más fácil que los niños disfruten con ellos y se involucren a la hora de recoger y ordenar la habitación.
En un cuarto de juegos también podemos incluir una zona de lectura, la que han creado en el cuarto de juegos de las fotos de este artículo y que podéis ver en la imagen sobre estas líneas, me ha gustado mucho. Son unos cuantos estantes bajos en los que colocar los cuentos a la vista y al alcance de los niños, junto a una zona de cojines para que puedan leerlos directamente en el suelo.
Otro elemento que no puede faltar es un escritorio. Los niños no siempre juegan en el suelo, también pueden hacerlo en silla y mesa y sobre todo porque les encanta pintar y dibujar y eso es mejor que lo hagan sobre un papel en la mesa que no en cualquier otra superficie que se encuentren por delante.
Si os fijáis en la pared veréis que han aprovechado la zona de escritorio para colocar en la pared los nombres de los colores. Será cuando el niño esté pintando y dibujando cuando más le interese conocer cuál es cada color y una decoración como esta le puede ayudar a identificar los distintos colores desde bien pequeño.
También me ha gustado mucho el detalle del reloj con las explicaciones de cómo se lee en él la hora. Que los mayores lo vemos como algo muy normal por la costumbre, pero aprender a ver la hora en un reloj de agujas tiene su ciencia. Yo aún recuerdo mi primer reloj de agujas y cuando mi madre me enseñó a identificar en él la hora que era.
Resumiendo los detalles más destacados son: el rincón de lectura, los muebles de almacenaje, el escritorio y las decoraciones de pared relacionadas con temas diversos. Nada es muy complicado y todo lo podemos conseguir fácilmente, a los niños les encantará y les ayudará a desarrollar competencias y capacidades al mismo tiempo que juegan y se divierten.
Vía | Apartment Therapy
En Decoesfera | Diez ideas para decorar un cuarto de juegos