¿Pensando ya en las vacaciones? ¿No quieres oír hablar ni por asomo del sol ni de las playas calurosas pero no quieres renunciar al mar? Entonces, quizás te encaje irte unos días a la costa este inglesa para alojarte en The Duna House. Una vanguardista casa situada en la localidad de Thorpeness, en Suffolk.
Esta casa, situada entre las dunas de las largas playas de esta zona de la costa inglesa, es un como una gran caja de luz gracias a la luminosidad que desprenden sus estancias mediante grandes ventanales en las partes superiores, y sobre todo, a la práctica inexistencia de paredes opacas en la planta baja, completamente acristalada para proteger a sus inquilinos del exterior.
La casa lleva la firma del estudio de arquitectura Living Architecture. Junto a la luminosidad que desprende la casa, destaca a primera vista ese llamativo tejado asimétrico plagado de ventanas de distintos tamaños.
Como podéis ver, el interior tiene una decoración bastante sencilla, porque lo realmente impresionante es la propia arquitectura de la casa. Pensando para relajarse y desconectar del mundo, sus creadores han apostado por colores suaves, predominando el blanco y el crema en contraste con la madera que aparece por todos sitios.
El salón y el comedor cuenta con una gran chimenea integrada en la pared frente a la que apetece sentarse con una copa de vino en mano. Además, la chimenea ocupa el lugar central de ese muro, ya que una pequeña librería en la que se ha ubicado el televisor queda totalmente desplazada hacia un lateral, dejando muy clara la importancia que tiene este electrodoméstico en esta casa de vacaciones.
Al lado, y sin separación alguna, está la zona de comedor. Una zona que me ha parecido especialmente atractiva pese a su sencillez gracias a la cristalera que rodea el espacio y que permite ver la playa y el mar de fondo mientras estás comiendo.
A continuación encontramos la cocina, también integrada en ese gran espacio de la planta baja sin divisorias, y en la que destaca la tremenda isla de cocina en la que preparar comidas y cenas mientras ves el exterior gracias a la cristalera.
El tono discordante con el resto de la casa, por decirlo de alguna manera, es el baño, ya que frente a la claridad del resto de espacios de esta casa, con esa ducha hidromasaje con teselas negras.
Las habitaciones siguen el mismo estilo decorativo sencillo y natural que en el resto de la casa, con escasez de muebles, gran presencia de madera, grandes ventanales para meter el paisaje en el interior de la casa y permitirnos despertar con el mar como telón de fondo, y una bañera integrada dentro del mismo dormitorio.
Y para acabar, quería mostraros uno de los espacios que más me han gustado. Se trata de una zona de estar de la planta primera con salida a una terraza ideal para relajarse leyendo o mirando el mar en los días que el tiempo no acompaña, y en la que han puesto un toque de color con esa alfombra verde, como si trataran de meter el paisaje en el interior de la casa. Un lugar idílico para pasar unos dias sin duda, ¿verdad?
Más información | Living Architecture
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