Llevamos tiempo observando la fuerte unión entre la arquitectura y el diseño y la enología. En España las grandes bodegas encargan sus ampliaciones o remodelaciones a prestigiosos estudios de arquitectura nacionales o exportados. Los más famosos los tenemos todos en mente: Zaha Hadid para Viña Tondonia, Norman Foster para las Bodegas Portia o Frank Ghery para Marqués de Riscal y Rafael Moneo en Señorío de Arinazano.
Esta tendencia se refleja también en las tiendas de vinos, vinos de diseño, tiendas de diseño. Cruzamos el charco para fijarnos en Mistral, una tienda especializada en enología en Sao Paulo, que ha encargado a uno de los estudios de arquitectura más famosos de Brasil, la realización de su nuevo local.
Las creaciones del Studio Arthur Casas están estrechamente vinculadas a una escala horizontal. Diseñan desde una silla a un barrio, influenciados por el espíritu modernista. ¿Qué es brasileño contemporáneo sino un cosmopolita?. Sus proyectos están internacionalmente reconocidos.
Un increíble equipo de diseñadores, arquitectos, divididos entre las oficinas de Sao Paulo y Nueva York, y que realizan obras a lo largo y lo ancho del globo: Tokio, París, Río de Janeiro, Sao Paulo y Nueva York.
Mistral es un ejemplo perfecto de cómo hacer de un espacio aburrido, un magnífico espacio. Para el minorista de vinos, y para el diseñador de interiores, este tipo de tienda supone todo un reto. Se trata de mostrar cientos de botellas aparentemente similares, de forma atractiva, interesante y funcional. Conseguir que las compras se hagan de forma agradable y fácil y ayudar a los consumidores a aprender más sobre el vino.
Me ha dejado impresionada como han utilizado la tecnología más puntera para dar la información de cada vino, cada bodega, tipo de uvas, región de la que procede, cata y maridaje, colocando la botella sobre la mesa central. El futuro ya está aquí.
También el sistema de visualización de botella que muestra cada botella de la etiqueta hacia arriba, elimina la necesidad de manipular las botellas. Los auténticos especialistas recomiendan los zarandear demasiado los vinos buenos, cada vez que un cliente desea mirar un vino, en una tienda normal coge la botella, la voltea y vuelve a dejarla en su sitio. Con este sistema no hay ni que tocarlas.
Una vez pasada la enorme "hall selección", nos conducen hacia una zona de bar,con sus estanterías de madera, a modo de barrica de roble francés o americano, de las que con su naturaleza conservan y dan su aroma a los mejores vinos, repletas de tomos sobre viticultura y enología, diseñado para aprender sobre el vino con la lectura y degustación. Catas, cursos etc.
El Studio Arthur Casas ha conseguido que comprar vino en Mistral, Sao Paulo sea todo un placer. ¿Os gusta el resultado?
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