Siempre he preferido las casas de una sola altura, me parecen más prácticas, reconozco que la escalera y la disposición de las estancias en dos plantas tiene su encanto, pero yo soy muy previsora y siempre pienso que en algún momento algún miembro de la familia puede tener dificultades para subir y bajar... Y en ese sentido no me convence, aunque a nivel decorativo ofrece muchas posibilidades.
Me ha parecido curiosa la idea de numerar los peldaños, el punto de partida es una escalera de madera antigua, para darle un aspecto más actual y renovarla, la escalera se puede pintar y a la hora de pintarla, se puede optar por un color liso o aprovechar para decorarla, esto no es muy habitual, no frecuente es el barniz... pero parece que pintada también queda bien, supongo que cada cierto tiempo habrá que repasar la pintura porque algo se irá estropeando.
La cuestión es que al pintarla en esta casa han decidido colocar en cada peldaño el número que le corresponde, creo que si la escalera fuese mía elegiría otro detalle como adorno, pero si hay niños en casa tal vez para ellos pueda ser divertido, desde que los niños son bien pequeños, los escalones tienen un especial atractivo para ellos, también puede ser una forma de que ayudarles a aprender los números, aunque del uno al diez no tienen mucha dificultad...
Vía | Design Sponge En Decoesfera | Una mala idea: un mural del abecedario en el cuarto de un bebé