Es el momento para podar los árboles y arbustos de hoja caduca, entre ellos los rosales, que suelen ser una de las plantas más habituales en los pequeños jardines. Podarlas tú mismo es fácil, y además puede ser bastante relajante, pero hay algunos puntos básicos que debes tener en cuenta a la hora de empezar.
El corte debe ser oblicuo, así evitamos que el agua se quede en el corte cuando regamos, lo que facilita que se desarrollen los hongos, también debe ser liso, nada de cortes rugosos, en las pequeñas rugosidades suelen refugiarse los insectos, además de ser también un buen depósito de humedad, y limpio, así la cicatrización será más fácil.
Todo esto lo puedes conseguir utilizando unas buenas herramientas, afiladas y limpias, pero para prevenir, también es conveniente proteger el corte con alquitrán, brea o pasta cicatrizante (que puedes encontrar en cualquier invernadero) que ayuda a que no se deposite nada en la herida, de forma que se previenen las infecciones, y se ayuda a que cicatrice antes.