Los fantasmas, lejos de asustar, pueden ser de gran utilidad en nuestro hogar. No, no llamen ni a un ocultista ni un psiquiatra de urgencia, todavía no hace falta. Me refiero a la última moda de inundar nuestra casa con estas simpáticas criaturas.
Un buen ejemplo es Rudy, el fantasma luminoso. Es una lámpara de mesa o incluso de pie (tiene unas medidas ideales para ponerlas en el suelo de un cuarto infantil). Diseñada por Slide Italian Design, cuesta 79 € y podeís encargarla desde Internet.
Y si te gustan estos personajes tan graciosos, puedes inundar tu jardín de fantasmas de cerámica. Este modelo, Winks, lo vende Habitat y hay en dos tamaños. ¿Te apuntas a la moda fantasmagórica?
Vía| Bem Legaus Más información | Habitat