El dormitorio es una de las estancias de la casa con tendencia a acumular malos olores y suciedad: las sábanas y las colchas desprenden malos aromas cuando no se lavan a menudo y la piel y pelo se descomponen en el suelo si no barremos con frecuencia.
Esto afecta evidentemente en el conjunto de la estética y percepción de la estancia, pues se verá desaliñada y desprenderá olores que no son precisamente agradables, sino más bien a sudor y a rancio.
No hay nada más desagradable que caer en estos vicios, sobre todo cuando se tienen invitados. Un hogar aseado es, definitivamente, mucho más hospitalario.
Eliminar gérmenes
Hay que eliminar todos los focos de malos olores: vaciar basuras con pañuelos y demás, polvo y textiles llenos de microorganismos que desprenden aromas fétidos.
Ventilación diaria
Aparte de lavar a menudo los textiles e higienizar el espacio, claro está, se tiene que ventilar a menudo el dormitorio: a diario, durante unos 15 minutos (por ejemplo mientras se desayuna). Esto cambiará los aires y ayudará a expulsar los malos olores.
No solo las sábanas
Cambiar las sábanas es un concepto amplio que también comporta cambiar las cojineras, fundas y todo tipo de textiles, sobre todo los que están en contacto con el cuerpo.
Brumas textiles
En las tiendas de ropa del hogar se comercializan brumas para perfumar las almohadas, sábanas y colchas. Un toque con estas aportará mucho frescor a la estancia y mucha personalidad.
El poder de las plantas
Usar las plantas como aliadas es una gran solución: la fotosíntesis hará su magia y se llevará el CO2 ofreciéndonos oxígeno limpio. La lavanda y el jazmín son buenas opciones, pero habrá que asegurar su aporte lumínico y la necesidad de cambiarles el agua para que no se conviertan en un foco de gérmenes.
Ambientadores
Los ambientadores están pensados para aportar, justamente, buenos aromas allá donde están. Si es una estancia difícil de airear, se puede optar por ambientadores automáticos que conseguirán un buen efecto.
Lavanda en los armarios
La ropa acumulada en los armarios es un foco de olores que se van infiltrando en la estancia. Poner saquitos de lavanda puede ser una gran solución.
Fotos | Terry Magallanes/Pexels, Chandlervid85/Freepik y Rorozoa/Freepik.
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