O mejor dicho para un ex-marinero que quiera jubilar su barca, cuando ya no nos sirve para ir al mar, podemos pensar para ella en otra utilidad como lugar de almacenaje a modo de estantería, solo hay que ponerla en posición vertical, después de haberle cortado un trozo para conseguir una base sólida.
En la imagen se ve claramente a lo que me refiero y no parece nada complicado, podemos pintar o lijar y barnizar en el color que mas nos guste para hacer que la estantería, antes lancha, encaje bien con la decoración de la habitación en la que queramos colocarla, que puede ser el salón de la casa o un dormitorio.
El estilo marinero es un clásico que nunca pasa de moda, sobre todo para habitaciones juveniles y casas de veraneo, claro que tiene que gustarnos y aunque a mi me pueda parecer difícil de creer, sé que hay gente a la que el mar no le gusta, pero para mi es uno de mis ambientes favoritos desde siempre.
Vía | DigsDigs En Decoesfera | Detalle para la casa de... un capitán de barco y Detalle para la casa de... un marinero