La semana pasada estuvimos en un encuentro con otros bloggers en el que nos contaron las últimas novedades en marcos de la marca Kodak. De entre todo lo que vi, lo que más me gustó fue el marco digital Kodak Pulse, que a simple vista es un marco como otro cualquiera pero que incorpora la capacidad de conectarse con Internet para introducir nuevas fotografías.
La pantalla que veis es táctil en toda su extensión y los controles son bastante sencillos, sobre todo si estáis familiarizados con otros dispositivos táctiles como teléfonos. La gran novedad es que cada marco tiene su propia dirección de correo electrónico a la que mandar las fotos que quieres que aparezcan y se puede sincronizar con tu cuenta de Facebook (lo que me deja con la duda de si decírselo a tus amigos, porque luego te etiquetan en cada foto que no querrías ver en tu salón por nada del mundo).
El marco es wi-fi, por lo que no haría falta ningún cable para que vaya recibiendo las imágenes de Internet, ya que coge la misma conexión del resto de la casa y caben en su interior hasta 4.000 imágenes, ya que tiene 512 MB de memoria interna. Eso sí, si sois más tradicionales tampoco tendréis problemas ya que el marco también se puede conectar a la manera habitual al ordenador.
Sobre la visualización, os puedo decir por el que tuve en las manos que se ve muy bien, gracias a la retroiluminación LED y tiene un tamaño mediano, de 7’‘ a muy buena resolución (800 × 600 píxeles). El precio es otra de las mejores cosas que tiene: 129 euros, bastante ajustado para su gama.
En el campo de las pegas, os diré que la base es fija y sólo se puede poner de manera horizontal (además eso impide colgarlo de la pared) pero ese es el único inconveniente que le encontré. Yo creo que puede ser un buen regalo para el día de la madre, como apuntaba una bloguera en la presentación, basta con que lo llenéis con las fotos que más le gusten a ella y seguro que se da un alegrón.
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