Ahora que acaban los calores y tenéis unas cuantas sandalias que querríais conservar en perfecto estado para el verano de 2013 es el mejor momento para pensar dónde guardar vuestro calzado estival unos meses sin perder nada de glamur decorativo. Aquí la clave, como siempre, es ocultar con estilo los zapatos y tener cuidado de que no pierdan la forma.
Cada zapato tiene sus propias instrucciones de conservación que os podrán indicar mejor en los blogs especializados, pero en lo que a almacenamiento se refiere, a mí me ha gustado mucho la idea que tenéis sobre estas líneas. Básicamente, consiste en encontrar unos baúles bonitos en los que poder almacenar esas sandalias que tan buenos recuerdos os traen de manera ordenada.
En función del tamaño y de la decoración exterior, estos baúles se pueden poner prácticamente en cualquier zona de la casa, con lo que tendremos una decoración funcional que nos ahorrará espacio de almacenamiento en los armarios por ejemplo, que es donde suelen acabar los zapatos. En los últimos meses, lo creáis o no, he visto los baúles más bonitos en tiendas especializadas en jardinería donde los usan como maceteros, pero si son grandes nos valen también para guardar sandalias.
Eso sí, no los pongáis encima de una mesa porque si tenéis alguna visita impertinente cabe la posibilidad de que los abran para cotillear qué hay dentro y que se lleven una sorpresa. ¿A vosotros os gusta la idea? ¿Dónde guardáis las sandalias durante el invierno? Por cierto, los baúles que hay justo sobre estas líneas son de Maisons du Monde y salen por 119 euros los dos.
Imágenes vía | Little Big Flat y Maisons du Monde
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