Desde luego que el cesto de mimbre no es una invención de estos días pero lo de combinarlo con patas de metal lacadas en colores alegres ya es otra historia, la idea es unir un cesto de buen tamaño a unas patas para que pueda servir a dos funciones, una como asiento ocasional y otra para almacenaje.
En el segundo caso, cuando lo vamos a usar para almacenaje el cesto se puede colocar en el suelo o sobre las patas a cierta altura, eso facilitará la tarea de coger y guardar cosas en muchos momentos, ya que al estar elevado sobre las patas no tendremos que agacharnos, a mi me parece buena idea, pero vamos a ver como queda en ambas funciones.
En la imagen podéis ver el cesto en sus dos usos, si lo colocamos boca abajo sobre las patas nos puede servir para sentarnos, aunque yo creo que si lo hacemos mucho el cesto se irá deteriorando poco a poco, su función natural es la otra, la de almacenaje y en ese sentido es bueno ponerle patas... de hecho seguro que muchos de vosotros habéis subido varias veces un cesto a un taburete para mayor comodidad.
Vía | Stilsucht Más información | Postfossil En Decoesfera | Cestos de rattan para usos diversos