En esta época del año uno de los motivos más habituales en decoración son los huevos de Pascua, la verdad es que en mi casa yo nunca he visto muchos, se ve que mi familia es poco tradicional en ese sentido, tal vez alguno de chocolate... Pero no sé por qué este año me he fijado en algunas propuestas decorativas que los incluyen y que me han parecido interesantes.
La que más esta que os muestro en primer lugar, que propone el uso de huevos para asignar asientos a comensales en una mesa de una fiesta, en realidad los huevos no son de verdad, son de madera, eso sucede muchas veces, lo del uso de huevos falsos... Están pintados con pintura pizarra para que podamos escribir con tiza sobre ellos y así reutilizarlos para más de una ocasión, aunque también se los podemos regalar a los invitados como recuerdo.
Después están ya opciones más sencillas cómo las de incluir los huevos en la decoración del salón o la cocina, podemos de nuevo hacerlo con huevos de verdad, decorados o no, hay tendencias ahora que huyen de la decoración excesiva y que prefieren dejarlos más al natural... Y también podemos usar huevos de mentira, los de la imagen sobre estas líneas, son de tela, por increíble que parezca.
Auténticos o falsos, los huevos se pueden colocar en solitario o rellenando cuencos a modo de centro, se pueden colocar también con hojas secas o alrededor de una vela... Podemos utilizarlos para la decoración de una mesa auxiliar en la sala de estar, de la mesa de comedor o de la encimera en la cocina, es un adorno temporal para la época.
Obviamente si los huevos son falsos el adorno nos durará mucho más, incluso podemos guardarlo de una temporada para otra, además corremos menos riesgo de que se estropeen o se rompan si los huevos son de madera o de tela que si son auténticos. A mi la verdad que me convence más el uso de huevos de mentira que el de los de verdad, aunque estos últimos resulten más románticos desde el punto de vista sentimental.
Para el que le guste mucho la idea de decorar con huevos, hay hoy en día infinidad de opciones, tanto para comprarlos ya decorados, cómo de tutoriales sobre como adornarlos o fabricarlos en el caso de los falsos, con pinturas, con telas, con recubrimientos cerámicos, con pedrería... Las posibilidades son casi infinitas, solo es cuestión de elegir lo que más nos guste para nuestro hogar.
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