No solo para la administración, sino también para los ciudadanos, los temas relacionados con la energía y su ahorro, son de gran importancia. Los edificios son fundamentales en el ahorro de energía, por ejemplo en la Unión Europea el cuarenta por ciento del consumo de energía proviene de este sector. Por eso los sistemas de protección solar correctamente utilizados, pueden contribuir enormemente al ahorro energético.
Un estudio de la Asociación Europea de Protección Solar concluye que se puede ahorrar el diez por ciento de energía mediante la protección solar automática. En la arquitectura moderna priman la transparencia y los espacios abiertos y esto, desafortunadamente, afecta muy a menudo al clima interior de las habitaciones. Aún cuando los vidrios sean de buena calidad, necesitan para adaptarse a los cambios bruscos del tiempo, sistemas de protección solar modernos.
Hay varios puntos básicos en los que la protección solar puede ayudar para favorecer el ahorro energético. Por un lado el sistema de protección solar evita el recalentamiento en verano y así se reduce o se elimina el gasto de energía en aire acondicionado. Por otro lado en invierno, la protección solar utilizada inteligentemente conduce la energía del sol a la habitación y baja el coste de energía en calefacción.
Las instalaciones de protección solar, situadas fuera o dentro, pueden contribuir a un aprovechamiento óptimo de la luz solar, minimizando así el consumo de energía en luz artificial. También influyen en el ambiente de la habitación de forma positiva, incrementando incluso el rendimiento del trabajo y proporcionando sin duda un mayor confort.
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