El fregadero es uno de los protagonistas de la cocina, está muy a la vista y es parte importante en la encimera junto a la placa para cocinar. A la hora de elegirlo debemos tener en cuenta el estilo de la cocina en su conjunto y lo que nos puede resultar más cómodo a nivel funcional. Hoy en día hay incluso accesorios como superficies de quita y pon o deslizantes para complementarlo.
Los fregaderos tradicionales son de acero inoxidable y suelen ir encastrados en la encimera, hay variedad en las formas y los tamaños, fregaderos rectangulares, cuadrados, redondos, simples, dobles... pero además hoy en día hay también otras posibilidades en materiales para elegir y se puede variar también la forma de colocación, vamos a ver algunas de las propuestas más novedosas.
Tendencias en materiales para fregaderos
Si bien el acero inoxidable es el más habitual entre los materiales utilizados para la fabricación de fregaderos, por la relación calidad precio que ofrece, por su resistencia y su durabilidad y porque no es muy difícil de limpiar, hay otros materiales posibles a tener en cuenta. Si queremos que nuestro fregadero tenga otro color podemos optar por ejemplo por piedras naturales o sintéticas.
Por ejemplo el fregadero sobre estas líneas está fabricado con una mezcla de resinas, es resistente a rayaduras, muy higiénico y tiene un aspecto muy moderno. También hay opciones en color con materiales sintéticos que pueden llegar incluso a igualar el color de la encimera y confundirse con ella.
Otra opción es la de la piedra natural, granito en concreto es lo que vemos en la imagen sobre estas líneas, tratado y preparado para conseguir homogeneidad en el color. En realidad está tan tratado que casi no parece piedra natural, pero el caso es que lo es así que tiene todas sus propiedades de resistencia y dureza.
Tendencias en colocación de fregaderos
En cuanto a la colocación si bien lo habitual siempre ha sido encastrar el fregadero en la encimera y dejarlo colocado sobre ella fijado con grapas o algo de silicona, hoy en día hay otras posibilidades para colocar el fregadero que son bastante diferentes. La idea es evitar que el fregadero sobresalga por encima de la encimera, para dar continuidad a la superficie y hacer que sea más fácil de limpiar.
En la imagen sobre estas líneas vemos una opción de colocación bajo encimera, que evita las juntas y las uniones, la encimera queda totalmente lisa y el fregadero es un elegante y práctico agujero en el centro, al principio puede resultar un poco raro al verlo, si no estamos acostumbrados, pero la verdad es que evitar juntas puede ser una gran idea.
Una opción intermedia entre el encastre tradicional y la colocación bajo encimera, es la de integración a ras que podemos ver en la foto sobre estas líneas, de nuevo la intención es facilitar el orden y la limpieza. Cuantas veces os ha pasado que se os cae algo junto al fregadero, un líquido por ejemplo y la altura del encastre supone un obstáculo a la hora de limpiar.
Así que si estáis pensando en cambiar la cocina o diseñando una nueva, no os olvidéis del fregadero y por supuesto de una grifería a juego y adecuada al modelo que elijáis, no hay porque quedarse con un fregadero de acero de los de siempre, podemos cambiar el material, la forma de colocarlo o ambas cosas, y con ello podemos conseguir resultados espectaculares.
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