¿Buscando una casa aislada del mundo para pasar unos días? Entonces, esta casa de madera te encantará. Esta situada en la isla escocesa de Skye, y se ha construido pensando minimizar su impacto en el medio que lo rodea gracias a la madera y al uso eficiente de la energía y del agua.
Este pequeño edificio fue levantado sobre pequeñas columnas de hormigón para tratar de afectar lo menos posible al terreno, mientras que la casa está recubierta de una madera local escocesa. Incluso la forma del edificio fue pensada teniendo en cuenta la climatología de la zona.
De esta manera, la casa se estrecha en su lado norte, mientras que la inclinación del tejado es mínima para reducir la exposición a los fuertes vientos que sufre la zona.
En total, la casa tiene 72 metros cuadrados. Y el lado norte, el que quizás sea más atractivo, tiene una pared totalmente acristalada que se abre hacia el mar. La planta baja es un espacio diáfano amplio y luminoso con zona de comedor y estar y una pequeña cocina, además de un dormitorio doble.
En la zona de estar, junto al ventanal, hay una estufa de leña que le da el punto acogedor a la estancia. Una estancia en la que la madera, al igual que en el exterior, es la protagonista.
Para subir al altillo, hay una escalera que comunica la planta baja con la primera planta, en la que hay un dormitorio con un gran ventanal con vistas al mar y a la sala de estar.
Una casa perfecta para aislarse del mundo y disfrutar de la naturaleza en una casa la mar de acogedora ¿Verdad?
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