Situada en la isla de Föhr (Alemania), en el mar del Norte, la "Hyggie Hus" es una casita tradicional de 140 m2 repartidos en dos plantas. Si el exterior respeta la estructura y los materiales de las construcciones típicas de la zona, el interior sorprende por su mobiliario de marcado estilo nórdico contemporáneo.
Su interior sorprende por la luminosidad del espacio gracias al blanco impoluto en paredes y techos y a las puertas de metal y cristal que separan estancias pero sin poner límites a la luz.
En la planta baja se sitúan la cocina y una amplia sala de estar y comedor que tiene una marcada zonificación porque la zona de estar está en una cota mas baja que el resto del espacio. De esta manera que los sofás rectos quedan perfectamente encajados en la zona de estar, sin generar apenas peso visual.
Los toques contemporáneos de la decoración la encontramos en los apliques industriales Tolomeo o las lámparas suspendidos de Tom Dixon que dan luz a un gran comedor con sillas de distintos estilos vestidas con cálidos textiles.
También en las puertas de aluminio negro, un buen contraste con las blancas paredes forradas de madera.
La cocina en una zona interior es inusual, pero está bien iluminada por un gran panel de vidrio que conduce a la escalera.
Los dormitorios se sitúan arriba, al igual que una gran sauna. El ático tiene un ambiente generoso y espacioso: se puede mirar a través de una puerta de vidrio a la habitación doble, y las dos habitaciones individuales se pueden abrir con puertas tipo granero al pasillo. El marcado tejado a dos aguas, el uso del espacio a través de los armarios empotrados y la paleta de color blanco consistente con detalles en negro también contribuyen a esta sensación.
La casa tiene además un pequeño jardín rodeado de setos con una terraza con está junto a la playa salvaje. Un casa con un montón de "Hygge-Flair" escandinavo para disfrutar de un merecido descanso.
