Cuántas veces hemos visto en películas de las Mil y Una noches esas puertas que se abrían a espléndidas habitaciones. Esas puertas que, en vez de ser cuadradas y aburridas como las nuestras, estaban coronadas por un arco lobulado, que recordaba a los aromas de oriente. Estoy segura de que os acordáis tan bien como yo.
Si eres de los que soñaban con vivir entre el lujo oriental y luego has quedado como mileurista, ¡no desesperes! Puedes conseguir tu propio arco lobulado pintándolo sobre el dintel en un color que destaque sobre el resto de la pared. Para hacerlo, sólo necesitas pitura, lápiz para dibujar por dónde debe ir el arco, una regla y cinta de carretero para no salirte por el borde.
Como veis, el resultado es espectacular a cambio de una pequeña inversión (mucho menor que la de hacer uno en escayola). Si lo vuestro no son los arcos lobulados y buscáis otros estilos, os recomiendo que visitéis Wikipedia y que elijáis el que más se adapte a vuestra personalidad.
Imagen vía | Made by girl
Ver 1 comentarios