Los baños están en plena transformación. Ya no son esos espacios relegados al fondo de la casa donde simplemente se cumplía una función biológica sin mayor pretensión estética. Hoy en día, el baño se ha convertido en un templo del bienestar personal, un refugio donde convergen la funcionalidad, el diseño y sí, por qué no, la tecnología. Porque después de invadirlo todo con inteligencia artificial y domótica, era cuestión de tiempo que los gadgets smart llegaran hasta los rincones más insospechados de nuestro hogar. Y no, no hablamos del espejo con Bluetooth, o de esos hiper mega caros inodoros japoneses.
La nueva tendencia es clara: pequeños accesorios tecnológicos que resuelven problemas que ni siquiera sabíamos que teníamos. Luces que se encienden solas, sistemas de ventilación inteligentes, grifos sin contacto, y ahora, el verdadero protagonista de nuestro baño por las noches: la iluminación interactiva del inodoro para ayudarnos a que usar el baño de noche sea más seguro.
Luz LED para inodoro: el accesorio que tu baño no sabía que necesitaba
El viernes 17 de octubre Lidl lanza una propuesta que es tan ingeniosa como absurda para muchos: una luz LED para el inodoro con sensor de movimiento. Este pequeño accesorio que se cuelga de cualquier inodoro convencional es el guardián nocturno perfecto para las noches.
Su funcionamiento es sencillo: cuenta con un sensor de movimiento de aproximadamente 2 metros de alcance que detecta nuestra presencia en la oscuridad y se enciende automáticamente. Traducción: no volverás a pisar las baldosas frías con los ojos cerrados, buscando el interruptor. Así, evitas accidentes innecesarios y el baño es mucho más fácil de usar por la noche incluso para los peques.
El dispositivo ofrece 8 colores diferentes con una función de cambio automático aproximadamente cada 15 segundos, o puedes mantener un color fijo pulsando un botón. También cuenta con un modo de luz continua. Además, incluye un sensor de luz que desactiva automáticamente la función después de unos 120 segundos, evitando que tu inodoro brille como una discoteca en miniatura a las 4 de la mañana.
Lo mejor del asunto es su instalación: no requiere obras, ni fontaneros, ni inversión económica considerable. Solo necesita tres pilas AAA que ya vienen incluidas. Mide poco más de 7 centímetros, pesa menos de 81 gramos, y está hecho de plástico. Y respecto al precio, cuesta 4,99 euros.
Fotografías | Freepik, Lidl
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