Cuando visito una catedral, mis ojos no suelen detenerse en los altares, sino que tienden a mirar hacia arriba, en busca de las siempre sorprendentes estructuras de las bóvedas y cúpulas. Más de una vez he tratado de plasmar en una foto esos hipnotizantes patrones catedralícios, aunque he de reconocer que nunca con la elegancia y precisión con la que lo hace David Stephenson.
Me cuesta desgranar los elementos que hacen tremendamente bellas estas fotografías. Probablemente tenga que ver con cosas tan simples como el amor que nuestro ojo tiene a la simetría y los elementos geométricos, pero seguro que también influye también el hecho de que esas figuras geométricas estén formadas por nervios que cumplen una función estructural, que no son simples adornos, sino que es un patrón dibujado por la física.
Obviamente, tampoco es baladí el trabajo del fotógrafo, que con sus magníficas composiciones, precisos encuadres y, sobre todo, el espectacular manejo de la luz, consigue transmitirnos emociones incluso más intensas que si estuviéramos personalmente debajo de tan impresionantes cúpulas y bóvedas.
Como no, os dejo con una pequeña galería, para que podáis disfrutar de cada uno de estos patrones catedralicios en detalle. Yo ya tengo una favorita ¿Adivináis cuál?
Vía | Fubiz Más información | David Stephenson En Decoesfera | Una buena idea: una pared cuadriculada