Raúl tiene un problema con la iluminación de su recibidor, y algunas dudas sobre la elección de la lámpara adecuada. Así nos lo ha contado.
...hace unos años lo iluminamos con una lámpara de esas en las que un cristal cubre la bombilla. El cristal es translúcido, y me he dado cuenta de que posiblemente por culpa de ese cristal la iluminación sea de menor calidad y haciendo un efecto muy desagradable. ¿Es posible que sea por culpa de ese cristal translúcido? ¿Qué tipo de lámpara me recomendáis?
Sin duda, y por los datos que nos da Raúl, la culpa de esa falta de luminosidad la tiene el plafón utilizado. Por experiencia sé que algunos modelos de lámparas de techo como la que tiene Raúl, atenúan de manera considerable la luminosidad de las bombillas. El cristal traslúcido deja pasar la luz, pero disminuye el efecto luminoso de la bombilla escogida. Desconozco la explicación científica, que seguro la hay, pero la realidad es esta.
Este tipo de luminarias suelen tener los plafones tallados con rugosidades y efectos decorativos que producen un efecto distorsionador, este puede ser el motivo por el que, según nos cuenta Raúl, además de emitir poca luz, esta ofrezca además un efecto desagradable.
Para obtener una buena iluminación es conveniente escoger lámparas que no tapen las bombillas con pantallas, y que tengan un buen número de fuentes de luz. Los focos de techo con varios puntos de luz orientables, son una buena opción, ya que permiten iluminar puntos claves de la estancia a la vez que ofrecen un buen caudal luminoso.
Las lámparas halógenas son adecuadas a espacios de poco uso, como son los recibidores, pero que necesitan de una iluminación excelente. El alto consumo de estas bombillas se ve compensado por un uso poco frecuente. El recibidor debe de ser una estancia muy bien iluminada, ya que es la tarjeta de presentación de nuestro hogar, nada más triste que entrar en una casa que nos recibe con una luz débil y desagradable.
Los recibidores suelen tener en ocasiones techos falsos, en los que se pueden colocar con facilidad focos empotrados. Estos tienen la ventaja de que despejan el techo, dan más amplitud a la habitación, y se pueden colocar tantos focos como sean necesarios. También pueden orientarse, de manera que a la vez que se ilumina toda la estancia, también se pueden resaltar cuadros u objetos que merezcan atención.
Yo me decantaría por unas buenas regletas de focos o varios puntos de luz empotrables, pero no escatimaría el gasto, y acudiría a un buen establecimiento en el que puedan aconsejarnos sobre los productos adecuados a nuestras necesidades. Confiando nuestras inquietudes al vendedor, este podrá orientarnos en la elección.
Si tú también quieres plantearnos alguna duda decorativa o deseas nuestro consejo, puedes escribir a editores(@)decoesfera.com.
Imágenes vía | Philips, Paulmann
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