Se calcula que actualmente en España hay aproximadamente 5 millones de edificios con barreras arquitectónicas, y eso a pesar de que la normativa (Real Decreto Legislativo 1/2013) obligaba a que todos los inmuebles fueran accesibles en diciembre de 2017.
La Federación Empresarial Española de Ascensores (FEEDA) respalda estos datos y además afirma que existen 1,2 millones edificios de viviendas construidos antes de 1981 sin ascensor.
Por otro lado, España es el cuarto país con mayor esperanza de vida del mundo, con 83,38 años y aunque es una buena noticia, esto produce que se acentúen ciertos problemas de movilidad que aparecen con la edad. Unido a este grupo, se encuentran las personas con alguna minusvalía física que le imposibilita la movilidad en un entorno urbano inaccesible. Es por ello que el entorno urbano debe adaptarse a estas necesidades, eliminando así las numerosas barreras arquitectónicas que presenta actualmente.
Para solucionar este problema, KONE empresa líder en el desarrollo de soluciones innovadoras y eco-eficientes para ascensores, escaleras mecánicas y puertas automáticas de edificios, pone en marcha un programa de accesibilidad para dirigir sus soluciones a personas con movilidad reducida.
La nueva reglamentación exige a los edificios ya construidos que faciliten el acceso a personas con movilidad reducida a todas las zonas comunes de la finca, incluyendo, por supuesto, su propia vivienda. Este requerimiento es el más complicado para las comunidades de vecinos, pues la puesta a punto es costosa.
Según el estudio interno que KONE ha llevado a cabo, serán 10 años los que separen a España de la consecución de la práctica totalidad de edificios accesibles. A pesar de que todas las edificaciones de obra nueva ya cuentan con equipamiento 100% adaptados, son muchos los inmuebles por reformar.
“La planificación urbanística tiene que estar pensada para lograr el libre flujo de todas las personas, sean cuales sean sus capacidades de movilidad,” afirma Javier Rodríguez, Jefe Nacional de ventas de KONE. “Nuestras soluciones de accesibilidad pretenden dar respuesta a todas esas personas que por un motivo u otro encuentran barreras arquitectónicas a su paso”, concluye Rodríguez.
Además de lo señalado en el reglamento, la Ley de Propiedad Horizontal por la que se rigen todas las comunidades de vecinos señala en su artículo 10 que "Tendrán carácter obligatorio y no requerirán de acuerdo previo de la Junta de propietarios...(..)...las siguientes actuaciones: b) Las obras y actuaciones que resulten necesarias para garantizar los ajustes razonables en materia de accesibilidad universal y, en todo caso, las requeridas a instancia de los propietarios en cuya vivienda o local vivan, trabajen o presten servicios voluntarios, personas con discapacidad, o mayores de setenta años..., con el objeto de asegurarles un uso adecuado a sus necesidades de los elementos comunes, así como la instalación de rampas, ascensores u otros dispositivos mecánicos y electrónicos que favorezcan la orientación o su comunicación con el exterior..."
Por tanto, si tu edificio todavía tiene problemas de accesibilidad, ya sabes que es cuestión de tiempo que se resuelvan.
Vía KONE.ES