Una oleada de robos con ácido en Estocolmo hace saltar las alarmas de seguridad, así como buscar desesperadamente nuevas formas e ideas que protejan nuestras cerraduras de estos comunes hurtos. Todo comienza en un bloque de apartamentos de Kungsholmen, en Estocolmo cuando dos de las viviendas sospechan un posible robo en común con una sustancia que facilita la apertura de la cerradura: el ácido.
Al verter este líquido sobre la cerradura de la puerta de entrada, el delincuente puede entrar fácilmente en casa y cometer cualquier tipo de delito sin que nada se le resista. Pero estos dos no son los únicos robos con esta sustancia, la policía alerta de una nueva oleada de 'robos con ácido' en la ciudad de Estocolmo que nadie descarta que puedan empezar a cometerse en España.
Por eso, según el experto en seguros y prevención de lesiones Erik Arvidsson, cree que puede ser bueno tener un sistema de protección con doble cerradura en la puerta de la entrada con el fin de que sea más complicado acceder, "dos candados son más difíciles que uno", afirma.
De esta forma, al ladrón le resultará mucho más complicado abrir las dos cerraduras con esta sustancia y, por consiguiente, el robo será más lento y con más posibilidad a ser detectado y detenido. Además, en caso de accidente, el seguro del hogar cubrirá los gastos, asegura el experto.
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