Cómo quitar la humedad y condensación de las ventanas utilizando el trucazo del calcetín viejo

Una solución casera para absorber la humedad del ambiente de manera eficaz y económica

Evitar a condensación en las ventanas
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No hay mañana que no me despierte y las ventanas amanezcan con goterones de condensación después de toda la noche con la calefacción encendida. Y es que, el contraste de temperaturas con el exterior, hace que se humedezcan los cristales, no solo ensuciando la superficie, sino que además, corre el riesgo de humedecer las paredes. Humedad que posteriormente se convierte en moho y despliegues de la pintura. En definitiva, todo un caos.

Sin embargo, no es un caos imposible de controlar, sino que existe un trucazo casero con el que evitar esa condensación y conseguir que nuestras ventanas luzcan perfectamente limpias incluso con temperaturas bajo cero en la calle. ¿Cómo? Solo necesitamos un calcetín viejo que no utilicemos, gel sícile o arena para gatos y una goma elástica para sellar el resultado.

Cómo evitar la humedad y condensación de las paredes y ventanas

Evitar la condensación de las ventanas

Que se humedezcan las ventanas es sinónimo de que, con el tiempo, van a aparecer goterones y manchas de moho en la pared. Por eso, no sirve con aislar las ventanas con persianas y cortinas aislantes, o comprar burletes adhesivos para que el frío no entre por la junta de las ventanas. Todo lo que necesitas es un calcetín.

Si, por estúpido que parezca, un calcetín va a evitar que ese vapor líquido condensado dañe los marcos de puertas y ventanas hasta traspasar en la pared en forma de humedad. Para ello, coge un calcetín viejo que ya no utilices o una bolsa de tela traspirable, rellena con gel sílice (las típicas bolsitas blancas que vienen en los bolsillos de las prendas de ropa) o arena para gatos, y sella con una goma elástica el resultado.

Coloca esta especie de 'bolsita anti humedades' que hemos creado sobre las ventanas que veas indicios de condensación y verás como las propiedades altamente absorbentes del gel sílice hacen su función de manera económica y eficaz.

Eso si, recuerda revisar el calcetín cada dos o tres semanas y reemplazar el material de su interior o secarlo si es reutilizable (por ejemplo, calentándolo en el horno o el microondas a baja temperatura). ¿Qué te ha parecido? ¡Pruébalo!

Imágenes | Freepik

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