Para aquellos despistados que todavía no sepan de qué va eso de las baby showers, decirles que son unas fiestas entre amigos (normalmente casi todas chicas) que se reúnen para celebrar la llegada de un bebé. Una fiesta para embarazadas, preparada con mucho mimo, cuidando cada detalle y, normalmente, reflejando en textos, estilo y colores el sexo del peque que llega.
En las baby showers, además de pasar un rato entre amigas, merendar, compartir confidencias unas con otras y ponerse al día, la gran protagonista es la embarazada y su bebé. Es por eso, que las invitadas regalan cosas para el peque: algunas útiles y más prácticas, otras para decorar su habitación, y también ropa para los primeros cambios... ¿Queréis más ideas?
Los colores base
Quizá una de las cosas que me gustan más de las fiestas temáticas, es que se ve muy claramente cómo conseguir organizar una con éxito. Los patrones de color y de simetrías son correctos y fáciles de seguir. Con una base en blanco y un marcado carácter delicado y femenino, esta baby shower se recrea en los tonos rosados y oro para completar la paleta de colores.
Además, los detalles kraft de bajo coste, y que le aportan carácter desenfadado al conjunto, son el elemnto complementario perfecto. El camino de mesa de papel, sobre el que descansa la hilera de jarrones y flores, no puede ser más bonito... ¿No os parece?
El rincón dulce
Las baby showers, normalmente son meriendas informales. Por eso, no puede faltar un rincón dulce lleno de cosas ricas. En esta ocasión, una cómoda de herencia, pintada en tonos claros, es la protagonista del candy bar del evento. Una preciosa tarta, los dulce bien dispuestos y con sus etiquetas bonitas, acaban de redondear el conjunto. Muy, muy apetecible.
Los servicios
Como ya hemos comentado, se trata de una merienda, por lo tanto, los servicios y los platos son de tamaño pequeño, al igual que los cubiertos. Nos servirán perfectamente en tamaño postre. Aquí podemos jugar un poco con la imaginación, porque lo realmente importante, son los detalles. La cubertería toda en oro, aunque no sea necesario que todos los elementos sean iguales; los jarrones todos en blanco, pero jugando con las alturas; Los vasos de cristal, al igual que otros elementos de la mesa...
El encanto de estas celebraciones, es conseguir un ambiente hermoso con un presupuesto bajo. Reciclar, combinar elementos diferentes y saber aunar los colores para conseguir armonía. Un buen ejemplo de ello, son los farolillos y guirnaldas de papel de la pared, que quedan espectaculares y están hechos en casa.
Comida deliciosa
En pocas fiestas la comida entra tanto por los ojos, como en las baby showers. Son puestas en escena de esas que te da pena comer. Muchas galletas, algunas de ellas realizadas especialmente para el evento; dulces, macarrons, tartas de varios pisos... Muchas cosas ricas y con una presentación de diez. Si os fijáis, el secreto está en la simetría a la hora de disponer la comida. Tanto en las propias bandejas, como en la mesa.
Por último, añadir que desde hace algunos años, hay una clara tendencia a incorporar cristal en botes, copas y tibores para introducir la comida en el interior. Visualmente no pueden quedar más bonitos, aunque realmente no sea lo más práctico.
Fotos para el recuerdo
Para regalar a la mamá, o para quedarse de recuerdo, las fotografías no pueden quedar fuera de este tipo de fiesta. Una imagen vale más que mil palabras, ¿verdad?
Desde luego, es un tipo de celebración muy inspiradora. Y es que, si algo tienen de bonito las mesas bien puestas, es que nos inspiran y nos dan ideas a la hora de crear nuestros propios eventos. Porque esta decoración, bien podría quedar perfecta para una boda informal, o una cena entre amigos. El caso es saber incorporar las tendencias que nos gustan a las necesidades del momento.
Vía | Style Me Pretty
Fotografía | Taya Photography
En Decoesfera | Decoración de mesa hora y plata