Un balcón estrecho y pequeño que se transforma de forma radical: de incómodo trastero a rincón de ensueño para el relax

Ahora que estamos terminando agosto llega el momento de pensar en reformas de transición. Durante el verano hemos centrado nuestra atención en espacios exteriores jardines, terraza y balcones y ahora podemos seguir haciéndolo pero con otra mirada.

Con la llegada del otoño tienen especial interés los balcones que están cerrados con cristalera, porque es fácil acondicionarlos y climatizarlos para poder disfrutar de ellos también en estaciones frías.

En este caso vemos un balcón estrecho que estaba totalmente desaprovechado al utilizarlo como trastero, incómodo además por la falta de organización. El cambio lo ha convertido en un rincón de ensueño para el relax que sin duda hará mucho más felices a sus propietarios durante todo el año.

Teniendo un balcón cerrado podemos caer en la tentación de poner cortinas o persianas y aprovecharlo como habitación extra y si fuese estrictamente necesario estaría bien, pero si no, no debemos renunciar al lujo de disponer de este espacio semi exterior que nos conecte con la naturaleza.

La zona de rincón de lectura con el asiento a medida ha quedado realmente adorable y con los complementos textiles ya anticipa que no solo es para utilizarse en verano.

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