Si tienes un salón pequeño y lo destinas, entre otras actividades a ver la televisión, una buena idea para ganar algo de espacio y comodidad es ocultarla cuando no se esté usando, por ejemplo dentro de un armario como el de la imagen.
De esa manera no necesitarás integrarla en tu decoración, a veces las televisiones son poco compatibles con nuestro estilo, sobre todo con el estilo rústico y el colonial.
Además, muchas veces la tele, como objeto más usado, termina comiéndose las otras funciones del salón, haciendo de este un lugar ruidoso que termina siendo el cuarto de la tele.
De esta manera conseguiremos evitar que la televisión sea la protagonista del salón, y además hacer de este un lugar más acogedor.
Imagen vía | Apartment therapy
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