El amarillo es un color que anima sólo con mirarlo. Es cálido, radiante sin agobiar y conjunta con un montón de tonos, por no hablar de que su complementario, el azul, es uno de los colores de esta temporada. Más allá de supersticiones absurdas a mí me encanta ese color y lo recomiendo en sus versiones más suaves para decorar salones.
Hace unos años se puso de moda pintar las paredes en color amarillo huevo pero ahora hemos pasado a tonos más claros que dominan menos la decoración. Así pues, ¿por qué no aprovechar y poner algo de amarillo en nuestra vida?
Hoy os traigo varias imágenes de un mismo salón para que veáis cómo quedan los detalles amarillos por si os puede dar alguna idea para cambiar el aspecto de vuestra casa sin una gran inversión de dinero. Lo bueno que tiene este color es que llama tanto la atención sobre sí mismo en ciertos ambientes que cambiará por completo una habitación con solo elegir los detalles adecuados.

En el salón que vemos encabezando el post tenemos un sofá y una mesa que son de un amarillo muy cantoso y que contrastan con el resto de la decoración que es más bien conservadora. El minimalismo impregna todos los muebles que son en blanco y negro pero vienen el sofá y la mesa a romper la monotonía.
Una mención aparte merecen los cuadros de la pared que no siguen ese movimiento minimalista pero que aportan mucha personalidad a todo el conjunto. Para destacar, me apasiona el gran espejo que tenéis al fondo y que refleja toda la luz posible, dándole una claridad envidiable. Eso sí, la bombilla colgando de un cable estropea un poco el conjunto.
Vía | Apartment Therapy
En Decoesfera | Una habitación… ¿en amarillo?
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todo en un dia
A mi me gusta, para mi a diferencia de ssrgss lo encuentro calido, no se si tiene cortina parece que si tiene un screen enrollable, pero no estoy seguro, no queda claro en la foto. Para mi el espejo es lo más destacado de la estancia. Decían que el amarillo sería el color de moda de este año, y puede ser, pero mas allá de modas pasajeras hay una cosa que para mi no cambiara y es que el negro y el amarillo se complementan a la perfección.
Saludos
Morthylla
Tengo la impresión de que es demasiado amarillo. Hubiera quitado las mesitas, por ejemplo. Pero tampoco me gusta mucho el salón porque es de esos "bajos", como le llamo yo, en que no hay elementos decorativos ni funcionales a más de un metro de altura. Eso me da una sensación de provisional.
Gelenius
Que bonito el espejo del fondo, que efecto de profundidad produce ¡¡ . A primera vista parece que hay otra sala contigua.
Saludos,
olga
El espejo le da amplitud y el color amarillo la verdad a mi no me gusta mucho.
pablur
A mi el amarillo me estresa y eso es lo último que quiero para el salón de mi casa. Cuando la tenga yo ya sé de que color va a ser el salón: verde no muy cantoso y con toques de color crema (quizá el sofa y las cortinas) y marrones oscuros. El amarillo como mucho para el baño, que por cierto vi uno que utilizaba colores cítricos tipo amarillo, naranja y verde y quedaba genial.
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