Soy la primera en defender el reciclaje en casi todas sus versiones, casi siempre que algo se pueda reutilizar o pueda servir como materia prima para la fabricación de otra cosa estará bien hacerlo, pero hay cosas que me siguen dando un poco de repelús. Una de ellas es el uso de pelo humano para la fabricación de asientos. Es cierto que en las peluquerías se junta cada día un montón de pelo y que algo se podría hacer con él, pero igual puede ser otra cosa y no asientos en los que quede a la vista.
Parte de ese cabello se utiliza para hacer pelucas, pero no todo vale, depende de cuanto se corte y de como, además no todas las peluquerías lo guardan con esa finalidad. Para hacer pufs como los de las fotos el pelo es estupendo porque el asiento queda mullido y es algo barato y relativamente fácil de conseguir. Pero a mi la idea no acaba de convencerme en absoluto, no soy capaz de imaginarme algo así en mi salón.
Tal vez en la zona de espera de un salón de belleza podría tener cierta gracia, aunque aún buscándole el contexto que me parece más adecuado sigue sin convencerme del todo. Tal vez si el recubrimiento fuese opaco y no se viese el pelo en el interior… Claro que si así fuese tendría mucha menos gracia, pero el reciclaje y el ahorro de material sería el mismo… A ver que os parece a vosotros ¿os gustaría un puf de pelo humano en vuestro salón?
Vía | Design Milk
Más información | Ola Giertz
En Decoesfera | Asientos fabricados con pelo
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