Si cuentas con un piso con más de 50 años no desesperes, hay formas sencillas y económicas de mejorarlo. Darle un toque un poco más moderno aprovechando elementos de la estructura original es posible. También incorporar novedades, como cambios en el suelo o paredes, son soluciones fáciles de instalar y aplicar. Te acercamos algunas ideas muy prácticas de la mano de Leroy Merlin.
Realza tallas y molduras
Es cierto que no todas, pero una gran parte de las viviendas de más de 50 años tienen techos altísimos que a su vez están adornados con diferentes molduras y tallas antiguas. Para gustos colores, pero la verdad es que este tipo de estancias con tanta altura son mucho más elegantes, además de parecer más amplias. Aprende a apreciar estos elementos y píntalos de algún color llamativo, como el verde o el azul turquesa, a juego con tus paredes.
Si quieres realzar todavía más las molduras, añade unas cuantas nuevas en uno de los muros. Conseguirás una decoración de lo más original y te servirán para tapar defectos.
Aprovecha los elementos arquitectónicos a la vista
Las vigas de madera y las paredes de piedra están de moda, ¿por qué no aprovecharlas si las tenemos a nuestro alcance? Son muchas las viviendas nuevas que intentan copiar estos acabados con papeles pintados o con vigas de otros materiales más ligeros. Si la tuya cuenta con estos elementos arquitectónicos de forma natural, aprovéchalos. Pinta las vigas de madera de blanco, e incluso tus paredes de ladrillo o bien déjalas en bruto, al natural. Sácale partido a cada rincón de tu casa amoldándola a un estilo rústico, neo rústico o industrial.
Ventanas y cerramientos como prioridad
Unas ventanas en buenas condiciones son una parte imprescindible de todo hogar. Si son viejas o de mala calidad, no solo el calor se escapará en invierno, en verano, la sensación térmica también aumentará por no aislar correctamente. Por este motivo, uno de los puntos más importantes a la hora de acondicionar una vivienda antigua es precisamente revisar todas y cada una de las ventanas, cambiándolas por otras nuevas si es necesario.
Mantenerlas a punto determinará el ahorro energético de tu vivienda; y es que, por ejemplo, cambiándolas por un modelo de PVC con doble acristalamiento este ahorro puede llegar a ser de hasta el 50%.
Cuando el problema es únicamente estético, una mano de pintura renovará por completo el aspecto de tus ventanas de madera. La pintura negra es elegante y combina bien con diferentes estilos, lo que te permitirá añadir unas cortinas actuales y bonitas que transformen todavía más la estancia.
Un nuevo suelo para tus pies
No caigamos en el error de pensar que cambiar el pavimento es costoso y engorroso. Hoy en día encontramos soluciones que se adaptan a nuestro presupuesto y que además no conllevan obra alguna. Es el caso, por ejemplo, de los suelos laminados. Se extienden encima del pavimento antiguo, respetando por tanto el mismo y evitando levantamientos innecesarios. Además, su colocación mediante sistema de clic es de lo más sencilla.
Una alternativa que también da buenos resultados es el suelo de vinilo. Se trata de un material autoadhesivo con una gran gama de acabados. No solo están los que imitan la madera, también otros que se rigen por tendencias actuales, como los que imitan los suelos hidráulicos que tanto vemos en las revistas.
Aunque para ganar estilo y esconder algún pequeño defecto siempre nos queda el recurso de utilizar una alfombra. Los tonos tierras, grises y beige son perfectos para looks neorústicos o contemporáneos.
Mima tus paredes
No podemos negar que una de las formas más fáciles de actualizar el interior de una casa es con la pintura. No obstante, ten en cuenta que una vivienda antigua quizá necesite trabajo extra. Grietas que arreglar o humedades que erradicar. En el primer caso la masilla es una solución excelente. En el segundo es necesario asegurarse de que las humedades no vengan de una fuga de agua, pues de esta forma, aunque las pintemos, volverían a salir.
¿Problemas con el gotelé? Si no quieres gastar dinero extra en retirarlo, puedes usar papel pintado. No obstante, para que quede perfecto, sin esos "bultitos" tan poco estéticos, coloca previamente un panel fino, de corcho o de madera, para que la superficie quede lisa.
Revitaliza los azulejos
Pintar los azulejos es una de las opciones low cost más efectivas para renovar un baño, aunque también puede servir para la cocina, un lavadero o cualquier lugar de la casa donde los encuentres y estén gastados o amarillentos. Ten en cuenta que a mayor brillo quedarán más llamativos pero también serán más visibles los desperfectos, así que si lo que quieres es disimular el paso del tiempo lo mejor es que te decantes por un esmalte mate especial para azulejos, resistente y lavable.
Haz que tus muebles viejos no lo parezcan tanto
Si el problema es que además también tus muebles son un tanto viejos, líjalos y píntalos, con solo estos sencillos pasos no parecerán los mismos. Recuerda limpiarlos y lijarlos correctamente, pues solo así lograrás que el nuevo color agarre bien. Además también es importante escoger la mejor pintura, con buena cobertura, para que las manos para terminar el trabajo sean menos.
Si te han gustado estas ideas en la página web de Leroy Merlin encontrarás todo lo necesario para ponerlas en práctica.
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