A todos nos gusta disfrutar de baños amplios, aunque la realidad, en muchas ocasiones, es que los metros cuadrados de esta estancia son menos de los que desearíamos. No te preocupes. Si cuentas con un baño pequeño hay soluciones para aprovechar el espacio, incluso para multiplicarlo visualmente. Te acercamos ideas prácticas y decorativas, de la mano de Leroy Merlin, que te ayudarán a sacarle el máximo partido a tu baño.
Una ducha con mampara mejor que una bañera
Las duchas ayudan a ampliar visualmente los baños. Estos elementos pueden adaptarse a cualquier rincón, cosa que las bañeras no. Para ubicar una bañera necesitas un espacio mínimo. En el caso de las duchas, además de encontrar platos de dimensiones reducidas, también existen las de obra.
Las duchas italianas, a ras de suelo, son capaces de adaptarse a cualquier rincón y muy prácticas en los casos en los que se quiere ampliar visualmente el espacio, pues hay una continuidad absoluta entre paredes y pavimento.
Si añadimos una mampara de cristal transparente conseguiremos que la luz tenga menos obstáculos y se proyecte por toda la estancia. Son elegantes y prácticas. Puedes encontrarlas en modelos diferentes, desde fijos de cristal (más económicos) hasta mamparas de pared a pared, que evitan al máximo las salpicaduras.
Un baño con una buena organización
La organización de todos los elementos del baño es determinante en los espacios pequeños. Lo ideal es que reservemos la ducha para la parte frontal, dejando la zona de la entrada un poco más despejada. El inodoro puede estar colocado nada más entrar, pero siempre intentando que no esté de cara a la puerta de entrada. La pieza principal, el lavabo, debe estar colocado entre el inodoro y la ducha.
Teniendo esta composición sencilla, es momento de fijarse en el espacio útil. Si hay metros suficientes para moverse, no es mala idea aprovechar la pared que queda libre para colocar algún toallero. Asimismo, la parte superior del inodoro puede servir para colocar un armario auxiliar de poca profundidad.
Puertas correderas que no entorpecen
Cuando diseñamos un baño debemos tener en cuenta la puerta del mismo. Las puertas convencionales restan espacio, pues al abrirlas siempre nos quedará una zona desaprovechada detrás de la misma. ¿Solución? Colocar una puerta corredera.
Estas puertas se introducen en la pared mediante un casoneto, por lo que cuando las abrimos quedan completamente ocultas a la vista. De esta forma, es posible aprovechar los rincones que desperdiciaríamos con una puerta de apertura convencional. Hay que destacar que además de las puertas con casoneto, también existen las puertas correderas con guías, que se sujetan encima de la puerta. No obstante, en este caso no quedan ocultas, y la pared exterior quedaría anulada al abrirla, sin posibilidad de colocar ningún mueble en la otra habitación.
El poder de los armarios abiertos
Los armarios abiertos son una solución interesante para tu baño pequeño. Al no ser cerrados, las dimensiones son menores, pudiendo adaptarse a cualquier pared de la estancia y dan mayor sensación de amplitud. Es cierto que las puertas y cajones facilitan el orden y la organización, pero también debes pensar que los armarios abiertos son más accesibles. Además, puedes sacarles partido colocando elementos que funcionen también como decoración, como toallas coloridas o cestas de mimbre, por ejemplo.
Espejos que ocultan almacenaje extra
Los espejos en los baños son totalmente imprescindibles. Por una parte, nos ayudan a asearnos y a prepararnos para salir de casa, por otra, son elementos que amplían visualmente las estancias. Un buen recurso extra es optar por espejos que ocultan muebles de almacenaje. Tienen mayor profundidad que los espejos convencionales, pero se perfilan como el lugar ideal para colocar los elementos de aseo diario.
Lavabos para baños mini
Los lavabos sin mueble o aquellos sustentados en una simple estructura sin cajones, tienen pros y contras que debes estudiar. En el caso de los baños extremadamente pequeños, funcionan estupendamente, pues eliminan obstáculos visuales en la parte inferior aligerando el conjunto. Sí, al colocar un lavabo de estas características pierdes almacenaje, pero si lo combinas con muebles exentos de rincón o baldas en las paredes no tendrás problema alguno para colocar tus productos de aseo.
Los lavabos pequeños pero profundos, como los que tienen una forma ovalada o redonda, también pueden servirte. Estos ocupan menos espacio, además, al ser tan profundos, evitan casi por completo las salpicaduras, un extra que siempre viene bien.
Apuesta por colores claros
Las paletas de color más claras siempre harán las estancias mucho más amplias. El motivo es que la luz se refleja mejor en estas tonalidades, y luz siempre es igual a amplitud. ¿Significa esto que no puedes colocar colores vivos en tu baño? No del todo. Un buen recurso es, por ejemplo, colocar un suelo llamativo como el pavimento tipo hidráulico y reservar los colores neutros y claros para las paredes. También puedes elegir un chapado llamativo para una de las paredes, optando por algo más suave en el resto del baño. Además, siempre es posible dar dinamismo con otros elementos como los textiles.
Atrévete con los inodoros suspendidos
Los inodoros suspendidos son también un recurso muy empleado en los cuartos de baño con poco espacio. Como en el caso anterior, al no llegar al suelo creas una sensación mucho más liviana en el ambiente. No se puede negar que se trata de piezas más estéticas y modernas, ideales para los baños con cierto estilo minimalista.
¿Y qué podemos hacer con las cisternas? Ocultarlas. Tan solo hay que empotrar la cisterna en la pared o bien crear un falso muro. Este falso tabique tendrá una repisa que también podrás aprovechar para colocar toallas, perfumes o cualquier otro producto que necesites tener a mano.
Si te han gustado estas ideas no te olvides de pasar por la página de Leroy Merlin, donde encontrarás muchas más para acondicionar tu baño.
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